El coste del vertido en el golfo de México supera ya los 596 millones de euros
La petrolera británica BP reconoce que la marea negra es una "catástrofe".- La indemnización por el desastre será de 60 millones
La petrolera British Petroleum (BP) ha informado hoy de que el coste para intentar contener el vertido de petróleo en el golfo de México asciende ya a unos 596 millones de euros. La empresa británica ha indicado que solo en la última semana el montante ascendió a unos 153 millones, pero precisó que es aún prematuro para establecer el gasto final.
BP ha aceptado hacerse cargo de los costes de la limpieza del golfo de México, además de pagar una indemnización de 75 millones de dólares (unos 60 millones de euros) por el vertido que provocó la explosión y posterior hundimiento hace un mes de una plataforma operada por la petrolera. La petrolera británica ha reconocido asimismo que la marea negra que se extiende hasta las costas estadounidenses es "una catástrofe".
El secretario del Interior de Estados Unidos, Ken Salazar, ha hecho el anuncio de la indemnización en una rueda de prensa tras reunirse con los directivos de la compañía en la sede central de BP en Estados Unidos, ubicada en Houston. Salazar ha expresado su "frustración y rabia" contra la petrolera británica por su incapacidad para contener el vertido dentro de los plazos establecidos, y ha advertido de que el Gobierno estadounidense "la dejará de lado" si se descubre negligencia por su parte a la hora de cerrar el flujo de crudo.
Según Salazar, BP no ha cumplido "fecha límite tras fecha límite" a la hora de sellar el pozo de crudo, a pesar de que se haya comprometido a pagar la cobertura máxima de por costes de limpieza, que son 75 millones de dólares.
El director de gestión de British Petroleum Robert Dudley, por su parte, ha asegurado en una entrevista con la cadena CNN que BP está haciendo todo lo posible para taponar la fuga por la que, según la compañía, salen unos 5.000 barriles de petróleo al día, mientras que otros cálculos apuntan a entre 25.000 y 95.000 barriles diarios. No ha dudado en calificar el incidente de "catástrofe".
"Es una catástrofe para el medioambiente, para BP y para la gente que está trabajando para parar el vertido", ha afirmado. "No hay duda de que llevará tiempo limpiar esta cantidad de petróleo en el océano" pero aseguró que hay técnicas que utilizarán para la limpieza y tomarán medidas e investigarán durante los próximos años el impacto que la marea negra puede tener a largo plazo.
"No hay nadie más desolado por lo que ha pasado que BP, nadie quiere más que esto se acabe", ha agregado Dudley, quien asegura que están "abiertos a cualquier investigación". La compañía tenía previsto poner en marcha este domingo una nueva técnica para tratar de taponar el vertido, pero el viernes el director de operaciones de BP, Doug Suttles, indicó que la operación se retrasaba a la semana que viene, probablemente el martes.
El método que pondrán en práctica se denomina top kill, se trata de introducir líquidos pesados y después inyectar lodo y cemento que cuando solidifiquen pueden frenar el flujo que emana. Si fracasara la operación, la petrolera podría recurrir a otra técnica, el junk shot, que consiste en introducir una variedad de materiales a alta temperatura como piezas de goma que harán circular por el tubo para bloquear el vertido.
En cualquier caso, Dudley ha asegurado que en el caso de que estos métodos fallen, la compañía no esperará hasta que el pozo de extracción alternativo que se está instalado esté listo, algo que se prevé para el mes de agosto. "No, todos nuestros planes están centrados en parar el flujo antes de eso", ha afirmado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.