Caritas Española recauda menos dinero por primera vez en 15 años
La ONG invirtió en 2003 más de 164 millones de euros en programas para la lucha contra la pobreza, de los que se beneficiaron más de un millón de personas
La presidenta de Caritas Española, Nuria Gispert, ha denunciado hoy que vivimos en una sociedad "que ha perdido los valores de caridad", al presentar la memoria 2003 de la organización, que revela que por primera vez en los últimos 15 años, la ONG recaudó menos dinero para sus programas que en el anterior ejercicio. La ONG invirtió en 2003 más de 164 millones de euros en programas para la lucha contra la pobreza, de los que se beneficiaron más de un millón de personas.
Durante el pasado ejercicio, las 68 Cáritas diocesanas de España manejó un presupuesto de 164.399.414,18 euros, lo que supone un descenso del 1,9% con respecto a 2002. El 62% de estos ingresos procedió de donaciones privadas y el 38% de fondos públicos y los programas que más ayuda recibieron fueron la cooperación internacional, la atención a personas mayores y la acogida y atención primaria, según ha explicado el secretario general de Cáritas, Silverio Agea. Agea ha indicado que dicho descenso se debe al "efecto euro", al endeudamiento creciente de las familias y a la manor presencia en los medios de comunicación de las crisis humanas internacionales.
En este sentido, el secretario general de Cáritas Española ha lamentado el decrecimiento de un 24% de las donaciones en el ámbito internacional, que se debe, según él, al débil tratamiento informativo del estado de los países en situación de crisis, como en Sudán, ya que "la recaudación es proporcional a la presencia en los medios". Agea no ha descartado tampoco que se esté produciendo una inhibición de los donantes ante la proliferación de las campañas de captación por parte de las ONG o la puesta en marcha de determinadas estrategias de imagen.
Andalucía la que más recursos recibe
Según los datos de la memoria 2003, los mayores esfuerzos se han concentrado en los programas de cooperación internacional a los que se han destinado 24,5 millones de euros, mayores (casi 21 millones), acogida (19,5 millones), empleo (18,2 millones) y personas sin hogar (15,5 millones). Por comunidades autónomas, Andalucía encabeza el porcentaje de recursos invertidos con casi 19 millones de euros, seguida de Cataluña (18,3 millones), Castilla y León (15,7 millones), Madrid (14,5 millones) y el País Vasco (12,7 millones).
Gispert ha subrayado la necesidad de "ejercer la ciudadanía como compromiso por la justicia", al tiempo que ha animado a los ciudadanos y a las autoridades a involucrarse para frenar los mecanismos generadores de pobreza, en una sociedad "que ha perdido los valores de caridad". La presidenta de Cáritas Española ha recordado que la naturaleza de la exclusión ha cambiado, "la pobreza tiene cara de mujer, de persona mayor y de inmigrante" y ha invitado a la población a no olvidar a los 1,7 millones de personas en situación de indigencia extrema que viven en España. "Tenemos que centrar nuestras acciones en la dignidad humana, por encima de la economía", ha señalado, al tiempo que ha lamentado que, muchas veces, en esta sociedad opulenta, se forman "muros" para no ver la pobreza.
La presidenta ha subrayado la importancia de la transparencia de las cuentas, que fueron controladas por una auditoría externa, que constituye, junto con la independencia y la austeridad, uno de los ejes centrales de esta organización. Agea, por su parte, ha señalado que de cada 100 euros invertidos por Cáritas, 79 se destinan a los programas de ámbito nacional, 14 a proyectos de cooperación internacional y siete a los gastos de gestión de la asociación. Gispert ha explicado que la memoria 2003 tiene una estructura diferente, adaptada al nuevo plan estratégico de Caritas, que propone "dar respuestas globales al problema de la exclusión" y que apuesta por la formación de los 68.000 agentes de la asociación, de los cuales 64.000 son voluntarios. "Nos gustaría que Cáritas no tuviera que existir", ha concluido Agea, ya que "sería una señal de que este mundo es más justo".
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