Casado insiste en que Ciudadanos es su “socio prioritario”

El fin del cordón sanitario de Ciudadanos al PSOE abre la puerta a que el partido de Albert Rivera pueda inclinar la balanza hacia los socialistas en varias autonomías y numerosos municipios. En esa tesitura —enfriada en las últimas horas—, el Partido Popular confía en imponerse como la opción favorita de la formación naranja en los pactos por venir. "La comisión negociadora hablará estos días primero con Ciudadanos, nuestro socio prioritario en cuatro autonomías desde 2015: La Rioja, Murcia, Castilla-León y Madrid, y más recientemente en Andalucía", ha dicho a su llegada a la cumbre de líderes del Partido Popular Europeo que se celebra en Bruselas.

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El dirigente popular ha negado que sus pactos con Vox incomoden a sus colegas europeos, y se ha mostrado dispuesto a "reconstruir piedra a piedra" el partido. Además, cree que en la triple cita electoral del domingo han recuperado apoyos gracias a que el votante "se ha dado cuenta de que la fragmentación beneficia a Pedro Sánchez" y se ha atribuido el liderazgo de la oposición ante los intentos de Rivera de arrebatarle ese rol. "Somos el único partido que ha crecido en este último mes con 700.000 votos más. Hemos quedado por encima de Ciudadanos y muy por encima de Vox", ha recordado.

Casado buscará este martes que sus socios del Partido Popular Europeo (PPE) secunden su posición "frente a los intentos de Puigdemont de deslegitimar la democracia española en las instituciones comunitarias". E incluso pidió al presidente del Gobierno que trate el asunto en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se celebra hoy en Bruselas, cuyo tema principal es el reparto de los cargos institucionales en la UE. "Espero que el PSOE y Pedro Sánchez aprovechen el Consejo Europeo para decir que España no va a tolerar que Carles Puigdemont intente agredir a nuestras instituciones en el tiempo que dure el debate de adquisición de su condición de parlamentario",

Según la Junta Electoral Central, Puigdemont, huido en Bélgica, debe acudir a Madrid para acatar la Constitución y recoger su acta de eurodiputado si quiere sentarse en el hemiciclo. Sus abogados no lo ven imprescindible, invocan su inmunidad como parlamentario, y están preparados para recurrir a los tribunales si se impide al expresidente catalán acceder a su escaño europeo. Casado se ha mostrado convencido de que no logrará entrar en la Eurocámara. "Si viene a España será detenido inmediatamente ya que es un prófugo de la justicia española", ha sostenido.

El líder del PP pidió meses atrás la reforma de la euroorden para impedir que se repitan casos como el de Puigdemont, que ha esquivado su extradición a España en Bélgica y Alemania. Este martes ha vuelto a insistir. "Solicitamos la inmediata modificación de la euroorden para incluir entre los procedimientos automáticos de entrega la rebelión y la sedición para no estar al albur de algunos tribunales regionales europeos".

Con los nombres de los futuros presidentes de Parlamento, Consejo y Comisión Europea todavía en el aire, Casado ha ignorado el retroceso de los populares en los comicios europeos —pasaron de 221 a 177—, y ha reivindicado la continuidad de miembros de su partido al frente de las tres grandes instituciones comunitarias frente a alternativas como la escenificada anoche por Sánchez y Macron en el Elíseo. "Otras alianzas como las que hemos visto ayer están muy bien y forman parte de ver si está más cerca Sánchez o Rivera de Macron, pero a nivel numérico las alianzas pasan por el PPE, que es quien tiene que seguir liderando la Comisión, el Consejo y el Parlamento porque así lo han decidido los europeos con su voto", ha defendido.