Medio millar de ultraderechistas y nostálgicos del franquismo acuden al Valle de los Caídos
Unas 400 personas asisten a una misa en memoria del dictador y de Primo de Rivera, delante de cuyas tumbas decenas de partidarios realizaron el saludo fascista
Medio millar de ultraderechistas, nostálgicos de la dictadura, curiosos y algún que otro turista despistado han acudido este martes al Valle de los Caídos atraídos por el 43º aniversario de la muerte del dictador Francisco Franco, cuyos restos el Gobierno quiere exhumar de lo que considera un mausoleo de Estado. El abad de los monjes benedictinos ha oficiado a las 11.00 una misa en memoria del dictador y de José Antonio Primo de Rivera. Tras la liturgia, de una hora, docenas de fieles se han agolpado ante las tumbas de los homenajeados y han realizado el saludo fascista. Justo al final de la ceremonia un sacerdote había pedido a los presentes "evitar cualquier acto ajeno conforme al carácter sagrado de la basílica y del Valle". Las coronas y ramilletes de flores, algunos con los colores de la bandera de España, han llegado a tapar las lápidas.
La jornada ha transcurrido sin incidentes reseñables. La Delegación del Gobierno ha desplegado un operativo con media docena de patrullas de la Guardia Civil en la entrada al Valle de los Caídos, donde se revisaban los maleteros a algunos vehículos, y el acceso a la basílica. El mal tiempo también ha influido en que no hubiera una mayor movilización en plena polémica por la intención del Gobierno de exhumar a Franco. "¿Qué no somos tantos? ¡Hace cinco años no venía nadie y los socialistas lo han puesto de moda!", opinaba Julián Sánchez, de 70 años. Como él, la mayoría de personas presentes eran de mediana o avanzada edad, aunque también había algún grupo de veinteañeros.
Un hombre se ha encarado con unos agentes que le han retirado una bandera preconstitucional. El Instituto Armado ha identificado a otro joven que ha hecho el saludo fascista ante la tumba de Franco. "¡Me dicen que he cometido un delito por levantar el brazo", se ha indignado mientras un individuo acusaba a la Guardia Civil de actuar como una "policía política".
Al oficio ha asistido Luis Alfonso de Borbón, bisnieto de Franco, que ha pedido "respeto" para su familia y no se ha pronunciado sobre la exhumación de los restos del dictador y donde sería enterrado de nuevo. "Te fuiste hace 43 años, pero estás más presente que nunca. Tus enemigos y unos traidores a la Patria no te olvidan, ni cesan de mencionarte. Otros muchos te seguimos recordando y rezando por ti", ha escrito en redes sociales. "Es el único de la familia que merece la pena", le ha faltado ruborizarse a una señora que se ha identificado como Carmen. Juan Chicharro, presidente de la Fundación Francisco Franco, que el Ejecutivo de Pedro Sánchez pretende ilegalizar, también ha acudido a la misa. La Fundación ha organizado una docena de ceremonias similares en recuerdo del dictador en distintas comunidades autónomas como Andalucía y Madrid.
La familia del dictador dispone de una tumba en la cripta de la catedral de La Almudena, en el centro de Madrid. El Gobierno no ha aclarado cómo lo hará pero no permitirá que Franco sea enterrado a unos metros de la Plaza de Oriente, donde solía presidir los desfiles militares de exaltación del régimen. El portavoz del Gobierno de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán, ha afirmado hoy que no cree que La Almudena sea "el sitio más apropiado". "El PP tenía que haber acabado con la Ley de Memoria Histórica, son unos blandos", ha sentenciado José Torres, de 68 años y que se ha declarado "futuro votante" de Vox. "Si es que falta amor a España", refunfuñaba otro señor de su quinta en la cola de entrada a la basílica.
"No vamos a permitir [que exhumen a Franco]", ha dicho retadora Pilar Gutiérrez, del Movimiento por España, que ha iniciado una campaña para la beatificación del dictador. "Franco está en el cielo, es un santo y ha sido reconocido por Papas como Pío XII, Juan XXIII y Pablo VI. Pedimos su beatificación por los innumerables favores que concede a quien le invoca", ha afirmado rodeada de miradas de incredulidad y sin aclarar a qué se refería. "El mayor milagro que hizo en vida fue el milagro español y resucitar el país" tras la Guerra Civil que originó liderando el golpe de Estado contra la República. "¡Paró al comunismo, lo peor que ha pasado en la Historia de la humanidad! ¡Eso tenían que enseñarlo todos los días en los colegios!", se iba indignada una acólita. Para entonces, el sol se abría paso y vencía a los nubarrones.
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