El juez pospone la decisión sobre los ‘exconsellers’ al inicio de la campaña

Los exconsellers que están en prisión acudieron este viernes al Tribunal Supremo con la esperanza de volver a la cárcel solo para recoger sus cosas. Pero nada más empezar las comparecencias, el magistrado Llarena advirtió a los abogados de que no iba a comunicar su decisión hasta el lunes. Si acuerda excarcelarles y les impone una fianza que puedan reunir con facilidad, el exvicepresidente Oriol Junqueras, los otros siete exconsejeros a los que la Audiencia Nacional envió a prisión (Raül Romeva, Carles Mundó, Dolors Bassa, Joaquim Forn, Meritxell Borràs, Josep Rull y Jordi Turull) y los presidentes de ANC y Òmnium (Jordi Sànchez y Jordi Cuixart) podrán abandonar la cárcel ese mismo día, apenas unas horas antes de que empiece la campaña de las elecciones del 21 de diciembre.

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El derecho a hacer campaña en libertad es uno de los argumentos que esgrimieron ayer los abogados de los líderes independentistas que se presentan a las elecciones en puestos de salida (todos menos Borràs y Cuixart). Los exconsejeros, según fuentes presentes en las declaraciones, también intentaron convencer al juez de que el hecho de que concurran a esos comicios, convocados por el Gobierno de Mariano Rajoy, es una prueba de que han aceptado la aplicación del artículo 155.

La aceptación de la intervención de la Generalitat por parte del Gobierno es uno de los mensajes que los encarcelados quisieron transmitir a Llarena porque fue uno de los argumentos que abrió la puerta a los miembros de la Mesa del Parlament para eludir la cárcel tras su declaración el pasado 9 de noviembre. Pero para demostrar que no existe riesgo de que vuelvan a delinquir, los exconsejeros tenían también que comprometerse a no actuar de nuevo al margen de la ley y a cumplir la Constitución, lo que implica abandonar la vía unilateral para alcanzar la independencia de Cataluña. Según las fuentes consultadas, todos lo hicieron, aunque con matices.

Diálogo y no a la violencia

Los imputados repitieron ante el juez los argumentos que ya mantuvieron en los escritos presentados hace unos días en el Supremo. Los 10 apostaron por perseguir la independencia desde el “diálogo” y sin recurrir ni alentar a la violencia. Romeva, a preguntas de su abogado, abogó por un referéndum pactado con el Estado, mientras que Forn y Borràs fueron más explícitos a la hora de renunciar a la independencia unilateral, según las fuentes consultadas. Aunque la intención de los 10 era convencer a Llarena de que les dejara en libertad, no todos coincidieron en sus estrategias de defensa. El exvicepresidente Junqueras y Romeva, ambos de ERC, se negaron a responder a las preguntas de la Fiscalía.

Esta actitud, según las fuentes consultadas, no tiene por qué ser determinante para que que el juez se decante por dejarles o no en libertad, pero Llarena sí que puede valorar el grado de colaboración con la justicia que han demostrado cada uno de los citados. El resto de los exconsejeros, que cuando declararon en la Audiencia Nacional solo contestaron a sus abogados, sí que respondieron ayer a los fiscales, aunque alguno optó por no contestar todas las preguntas.

Este cambio de actitud y sus mensajes de acatamiento de la legalidad no convencieron, sin embargo, a la Fiscalía del Tribunal Supremo que, tras las comparecencias, pidió al juez que, “ante la gravedad de los hechos investigados”, los exconsejeros y los presidentes de ANC y Òmnium sigan en prisión incondicional. Los dos fiscales que asistieron a las declaraciones, Jaime Moreno y Consuelo Madrigal, entregaron a Llarena un informe en el que detallaron provisionalmente las responsabilidades de cada investigado. “En todo caso, la Fiscalía considera que en estos momentos persisten los riesgos de fuga y de reiteración delictiva”, informó un portavoz del ministerio público.

No obstante, esto no indica que Llarena vaya a seguir el criterio de la Fiscalía. Los fiscales también pidieron la prisión condicional el 9 de noviembre para los exmiembros de la Mesa del Parlament y el magistrado no la decretó.