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La leyenda fantasmagórica del edificio que da cobijo a Casa de América

El Palacio de Linares, construido a finales del siglo XIX, oculta un pasado envuelto en historias basadas en fantasmas y fenómenos paranormales

Interior del Palacio de Linares de Madrid durante la celebración del "día de difuntos", en 2010.
Interior del Palacio de Linares de Madrid durante la celebración del "día de difuntos", en 2010.CLAUDIO ALVAREZ

De la historia surgida entre un edificio antiguo de la capital de España, una pareja de (hermanastros) enamorados, un padre que guarda un secreto inconfesable y la influencia del Vaticano solo podía salir una leyenda de 130 años de antigüedad, que hoy en día, sigue despertando curiosidad entre paseantes y visitantes que desean saber más sobre lo que oculta el edificio del Paseo de Recoletos, actual sede de Casa de América. La leyenda del edificio alberga, además de las instalaciones de la institución que fomenta la cultura hispanoamericana, la leyenda del fruto de un incesto familiar y de una hija nacida con el estigma de una oscura maldición.

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La historia comienza a finales del siglo XIX, cuando se terminó la construcción de una obra palaciega en una esquina de la plaza de Cibeles. El arquitecto que lo hizo posible fue Carlos Colubí, funcionario municipal, y el encargo provenía de Don Mateo Murga Michelena, un empresario de la época, en 1863. Don Mateo, además de atesorar una gran fortuna, tenía un hijo con el nombre de José de Murga y Raolid. La situación de la familia no podía ser más prometedora hasta que el hijo le confiesa a su padre que está enamorado de una muchacha, en concreto, de la joven Raimunda de Osorio, de origen humilde. 

El padre, se llevó un disgusto, pero no le habló a su hijo del secreto que se ocultaba detrás de aquella mujer. Así que, Don Mateo le envió a Londres, sin apenas tiempo de reacción. Poco después, el viejo empresario falleció y su hijo regresó a la capital. Esta vez, José —que ostentaba el título de marqués de Linares— se casó con su amada pero pronto una ingrata sorpresa se cruzó en el camino al encontrar una carta del puño y letra de su padre con una historia sorprendente, escrita justo el día que el joven había tomado rumbo a Londres: "Te habrá sorprendido, querido hijo, mi reacción, después de haberte dicho tantas veces lo contrario, a la confesión de tu amor por la hija de la estanquera; pero es que esa muchacha es tu hermana...".

Siempre según afirma la leyenda, el joven marqués pidió ayuda al papa León XIII para buscar consejo. Este dictó una bula papal que se tituló Casti convivere (vivir juntos, pero en castidad). Pese a ello, los dos amados decidieron ir más allá en la relación y tuvieron una hija, a la que llamaron Raimundita, asesinada nada más nacer.

Descubrimiento de psicofonías y voces de ultratumba

Al margen de la leyenda, desde la muerte de María Villapadierna —la última heredera que habitó el lugar— fue sede de varias empresas hasta que en 1989 pasó a manos del Ayuntamiento, que lo rehabilitó. Durante las obras, los obreros y guardias de seguridad afirmaron "haber escuchado ruidos, pisadas y voces de ultratumba tales como: "Yo tuve una hija", "¿Mi hija Raimunda? Nunca oí decir mamá". Como consecuencia, varios expertos en psicofonías entraron en sus estancias (el edificio alberga hasta 10 salas, tres salones y una capilla, entre otras habitaciones) para dar una explicación lógica a estos sucesos paranormales. 

Tiempo después, otro grupo de expertos afirmó que las voces escuchadas eran en realidad una "mezcla de hábiles trucos"

Entre todos los informes planteados, destacaba uno de Carmen Sánchez de Castro que se envió al Ayuntamiento y en el que se tomaron 283 fotografías del interior del Palacio. Un total de 22 de ellas eran supuestos hechos paranormales manifestados "en forma de manchas de luz". En la investigación se usaron varias cámaras de vídeo, infrarrojos y hasta un detector de metales. Sánchez de Castro recordó una vivencia ocurrida en aquel año: "Una de las personas que me acompañaba entró en la habitación contigua. No hice más que entrar y salí despedida hacia atrás. A principio pensé que yo misma me había echado hacia atrás del propio susto. Sentí como si el viento me empujara".

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Sin embargo, un año después varios expertos en la materia desconfiaron del trabajo llevado a cabo por Sánchez de Castro al afirmar que las voces escuchadas eran en realidad una "mezcla de hábiles trucos" y añadieron que las pruebas que se presentaron "no reunían el crédito suficiente que deben tener esta clase de experiencias".

El edificio se reabrió al público en 1992 como sede de Casa de América. La intención inicial del Ayuntamiento fue "poner el palacio al alcance de la gente de Madrid" y mostrar su "valioso patrimonio histórico y artístico". Pese a todo, y reconociendo el filón turístico que podía representar para la ciudad, hoy en día, cualquier visitante puede conocer sus diferentes estancias de mano de especialistas en Historia y Arte que también les relatarán el pasado oculto y secreto de una de las residencias más impresionantes del Madrid del siglo XIX. 

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