Exteriores mantiene el pulso por el conflicto en Gibraltar

El Gobierno está estudiando la viabilidad jurídica de las medidas que anunció al empezar la crisis en Gibraltar, como la de cobrar una "tasa de congestión" -un peaje de 50 euros para entrar o salir- . La Abogacía del Estado y los técnicos de los distintos ministerios afectados -Interior, Hacienda, Fomento y Medio Ambiente-  están analizando, según Exteriores, la posibilidad de implantación de tales medidas. 

El Ejecutivo admite que no hay un plazo previsto sobre cuándo podrían estar resueltos dichos informes jurídicos sobre las medidas planteadas para "apretar las tuercas" al Peñón , pero asegura que terminarán implantándose y que hay base para hacerlo.

El ministro de Exteriore sno  tiene previsto contestar hoy a las duras declaraciones del Gobierno de la colonia, como las del ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo,  quien ha dicho que la actitud del Ejecutivo español es más propia del régimen franquista o de un país como "Corea del Norte que de un socio de la UE".

De momento, España tampoco planea hacer gestos como el del Gobierno británico de convocar al embajador español en Londres, Federico Trillo -a la cita acudió su número dos, Ramón Gandarias-.  

Lo que sí ha hecho ya el Ejecutivo es denunciar ante la Fiscalía de Medio Ambiente el vertido de 70 bloques de hormigón en aguas españolas próximas a Gibraltar.

El secretario de Estado de Exteriores, el diplomático Gonzalo de Benito, sí ha querido defender hoy como "proporcionados"  y "no discriminatorios" los controles que España hace en la verja de Gibraltar. En declaraciones a Efe, el número dos del Ministerio ha manifestado que España tiene la misma "preocupación" que el primer ministro británico, David Cameron, por la situación en la frontera, pero ha recordado su disposición a "seguir hablando y colaborando con el Reino Unido y eventualmente con Gibraltar y con el Campo de Gibraltar" .