Cospedal: “De ninguna manera se perjudicará a autonomías cumplidoras”

La dirección del PP no se cansa de repetirlo en los últimos días: el reparto del déficit, el asunto que más preocupa a los presidentes autonómicos del partido, no perjudicará a las autonomías cumplidoras. "De ninguna manera", ha querido dejar claro hoy la número dos de los populares, María Dolores de Cospedal, tras reunir al comité de dirección del partido.

"El Gobierno", ha enfatizado, "presentará un proyecto que establecerá unos parámetros y justos y equitativos". "Así será la manera en la que va a actuar", ha añadido, por lo que no se verán perjudicadas las comunidades que cumplan con el objetivo de déficit, frente a aquellas que no han logrado ajustarse a los límites impuestos por el Ejecutivo. El sábado, el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se comprometió con una "distribución ordenada" del esfuerzo entre todas las Administraciones, en referencia a la central, autonómica y la Seguridad Social.

Pese a los mensajes tranquilizadores del Gobierno y del partido, la inquietud entre los barones no ha cesado, puesto que no hay nada cerrado. Hacienda está negociando de forma bilateral, pero el Consejo de Política Fiscal y Financiera, previsto para junio, el órgano encargado de pactar el reparto. Este fin de semana, el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, pidió a Rajoy que la carga de las comunidades no supere el 35%.

También para preparar esa reunión, Rajoy ha convocado a los mandatarios autonómicos del PP a un almuerzo el próximo lunes en Génova. La secretaria general ha asegurado que esa cita se enmarca dentro de la normalidad al producirse periódicamente. En ella, ha agregado Cospedal, se abordarán no solo el reparto del déficit, sino también otros asuntos de actualidad como la reforma de la Administración y su alcance, que un sector del PP quiere que sea más "radical".

Tras esa comida, el jefe del Ejecutivo viajará a París y dos días después, el 29 de mayo, la Unión Europea autorizará oficialmente una relajación del déficit para este año (hasta el 6,3% frente al 4,5% previsto inicialmente). A partir de esa cifra, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y los presidentes autonómicos podrán avanzar en la negociación del reparto asimétrico, un proceso que la mayoría de barones del PP temen que acabe beneficiando a Cataluña por razones políticas.

Uno de los más beligerantes en este sentido, el presidente extremeño, José Antonio Monago, aseguró el viernes que el PP "no es una secta" y que sus dirigentes pueden manifestar opiniones distintas. En las últimas semanas lo han hecho, además de Monago, Alberto Núñez-Feijóo, Ignacio Diego, Pedro Sanz y Juan Vicente Herrera. El valenciano Alberto Fabra se pronunció, en cambio, a favor del déficit a la carta y llegó a pedirlo abiertamente para su comunidad.

Preguntada al respecto, Cospedal ha minimizado las críticas exigiendo disciplina al mismo tiempo. "Yo creo que en estos momentos el apoyo al Gobierno para sacar a España de la crisis es algo que debe ser innegociable para aquellos que pertenecen al PP… Se puede opinar de forma distinta, pero todos estamos de acuerdo y también Monago sabe que es necesaria una política de apoyo al Gobierno".