Los Sanchos de la ciencia

Estos días hemos conocido el caso de distintos investigadores corruptos que engordan el sistema de publicaciones científicas actual. El conocimiento científico no avanza gracias a estas “grandes mentes”, sino al esfuerzo de cientos de miles de escuderos de la ciencia. Investigadores anónimos que subsisten gracias a pequeños proyectos con una financiación, muchas veces, ridícula. Sanchos que no están a la sombra de famosos Quijotes que firmen sus artículos y proyectos. Escuderos que muchas veces el sistema engulle, devora, agota y descarta, sabiendo que siempre habrá nuevos Sanchos dispuestos a iniciar una carrera investigadora. Investigadores que en la mayoría de las ocasiones no aparecerán en entrevistas, ni recibirán grandes premios, que serán olvidados. Pero, en definitiva, personas llenas de ideales, que saben que trabajan para un sistema científico corrupto y rancio, pero que creen en la ciencia como la mejor herramienta para el avance de la sociedad. Que luchan contra gigantes, aun sabiendo que, en realidad, son simples molinos de viento.

Javier Frontiñán Rubio. Ciudad Real

Poca esperanza

Acabo de cumplir 18 años y quiero estudiar una carrera universitaria. Al igual que yo, muchos estudiantes nos preguntamos si conseguiremos un trabajo bien remunerado y acorde con lo que hemos estudiado o si, por el contrario, tendremos que salir del país para conseguir un sueldo que nos permita vivir en condiciones. La situación para la gente joven es España muchas veces no es la mejor. Lo podemos ver en que cada vez nos independizamos más tarde y tenemos hijos más tarde.

Ana González Álvarez. Valencia

¿Tecnología es evolución?

Es indudable que la tecnología ha avanzado de manera vertiginosa en las últimas décadas, lo que ha supuesto una transformación en muchos aspectos de la vida. Sin embargo, hay que ser consciente de sus ventajas y desventajas. Uno de los principales retos es la brecha digital, ya que no todas las personas pueden tener acceso a la nueva tecnología. Otro reto al que se enfrenta la sociedad es el impacto que tiene en el ámbito laboral, motivo de la automatización y la inteligencia artificial. Otro asunto es el cambio en las relaciones interpersonales que nos trae la tecnología.

Jordina Serra Solés. Sant Vicenç dels Horts (Barcelona)

Ya no hay turismos

Nos vamos a comprar un coche. Por un mes, toca hacerse los mayores expertos del pueblo en automóviles. Motores tricilíndricos turboalimentados, maleteros que se miden en litros y cámaras visionadas en pantallas de 10 pulgadas para poder ver con claridad cómo lo arañas al aparcar. Información que desecharemos de nuestra memoria en cuanto haya que cambiarse de compañía eléctrica o aprenderse una receta. Los dramas de la clase baja que ansía ser media. “Cómprate un SUV. Tienes las de ganar en caso de colisión”, dicen. Vale. Eso sería verdad en un mundo en el que nadie tuviese un coche grande. Pero ahora sales a la calle y ya no quedan turismos. Dentro de poco llegarán los tanques, no para las guerras, sino para llevar a nuestros hijos hasta la puerta del cole.

Félix García Ortiz de Galisteo. Chiclana (Cádiz)