Estafas telefónicas
Los lectores escriben sobre el ‘phishing’, las formas para informarse de los jóvenes, el turismo masivo y el cambio climático
La tecnología cada vez se vuelve más peligrosa. Cada día somos más vulnerables ante los avances tecnológicos, ya que confiamos en poner todos nuestros datos privados en un teléfono móvil o en un ordenador pensando que los únicos que podemos acceder a esos datos personales somos nosotros. No es así. Cada vez son más los hackers que intentan acceder a los móviles mediante enlaces falsos o con una simple una notificación que envían por mensajería. Un ejemplo muy claro le pasó a mi madre hace unas semanas. Le llegó un mensaje que ponía: “Hola mamá, soy tu hijo, he perdido el teléfono, llámame a este número”. Todo encajaba a la perfección porque mi hermano en ese entonces estaba de viaje y podía haber perdido su teléfono. Si mi madre hubiera pinchado en ese móvil, a lo mejor se habrían filtrado todos sus datos o le habrían estafado. Hay que tener mucho cuidado con estas cosas y andar con pies de plomo para seguir manteniendo nuestra privacidad a salvo.
Eva Pinto López. Madrid
Nos están ganando la partida
Supongo que soy de los lectores a los que todavía les gusta tener la información en sus manos, de manera literal. Observo atónito la cara de desconcierto de mis compañeros de clase al verme llegar con un ejemplar de EL PAÍS. Supongo también que la información, al igual que la sociedad, se transforma. Quizás la sorpresa de mis compañeros no era por informarme, sino por el medio. A los jóvenes, TikTok nos está ganando la partida.
Juanma Ponferrada. Málaga
Un verano más, masificados
Cada año, millones de personas se trasladan en masa a destinos turísticos populares, lo que da lugar a problemas graves como la congestión, la falta de espacio y la degradación del medio ambiente. Este fenómeno no solo afecta a la calidad de vida de los residentes locales, sino que también crea un ambiente caótico e incómodo para los turistas que buscan relajarse y disfrutar de sus vacaciones. Es importante que se promueva un turismo responsable y sostenible, que respete la cultura local y el medio ambiente, y que contribuya al desarrollo de las comunidades.
Borja Hernández Puig. Sitges (Barcelona)
Tratemos de frenar el cambio climático
La sequía, el aumento de temperatura, el invierno de corta duración, la desertificación de la tierra o las lluvias torrenciales, son las consecuencias actuales sufridas por el cambio climático, parecen no tener fin e ir solo a peor. Incendios, gases de efecto invernadero, deforestación, pérdida de ecosistemas, contaminación de espacios naturales... solemos leer y escuchar sobre estos problemas en las noticias y periódicos, pero llega un momento en que se nos hace repetitivo y ni nos sorprende, lo acabamos normalizando y aceptando. Quizás, cada vez que oímos estas cuestiones, deberíamos pensar un poco en los pequeños de la familia y el futuro que les espera en el mundo, deberíamos pensar si lo estamos haciendo bien tirando este plástico al suelo, o si realmente están tan lejos como parece esos contenedores de reciclaje al final de nuestra calle.
Gonzalo Agustín Lloscos. Valencia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.