La guerrilla M23 entra en la estratégica ciudad congoleña de Goma con apoyo de Ruanda
Congo acusa al país vecino de haberle declarado la guerra. El grupo rebelde pide a los habitantes de la localidad que se mantengan tranquilos después de su “liberación”
Milicianos del grupo rebelde M23, con el apoyo de soldados ruandeses, entraron el pasado domingo en la ciudad de Goma, en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC), según ha reconocido el Gobierno congoleño. Su portavoz, Patrick Muyaya, confirmaba este lunes en la red X la “presencia del Ejército ruandés” en Goma y pedía a la población que se quedara en casa y se abstuviera de cometer actos vandálicos. El propio M23 aseguró también mediante un comunicado que la capital de Kivu del Norte estaba bajo su control, aunque se han producido enfrentamientos en distintos barrios de la ciudad y aún quedan bolsas de resistencia de soldados congoleses y sus aliados. Congo asegura que Ruanda le ha declarado la guerra.
El avance sobre Goma del M23 con el apoyo de miles de soldados ruandeses ha sido imparable. Residentes en la ciudad han compartido vídeos en las redes sociales en los que se ve a los rebeldes patrullando las calles entre el júbilo de la población. El grupo rebelde ha pedido a los habitantes de Goma, mediante un comunicado, que se mantengan tranquilos después de su “liberación”. Miles de personas han intentado huir hacia Ruanda, pero la frontera entre ambos países estaba cerrada este lunes, según fuentes diplomáticas, y solo se permitía el paso al personal de Naciones Unidas. Varias unidades militares congoleñas han entregado sus armas a la ONU y se han acantonado en una de sus bases, según las mismas fuentes.
La situación es caótica en Goma, una ciudad de un millón de habitantes. Al mismo tiempo que se producen enfrentamientos en ciertos puntos, el agua y la luz están cortadas (según la empresa Virunga Energies, que abastece a la ciudad), y medios locales relatan quela mayoría de los comercios cerrados y que se ha producido una fuga masiva de la cárcel de Munzenze, donde estaban encarceladas unas 3.000 personas. El aeropuerto, que los rebeldes aseguran haber tomado, está inutilizable, según Bintou Keita, responsable de la Misión de la ONU para la estabilización del Congo (Monusco), durante la reunión del consejo de seguridad de Naciones Unidas el domingo. “No se puede utilizar para evacuaciones o esfuerzos humanitarios”, dijo.
Con el personal de la ONU en plena retirada y la frontera de Ruanda cerrada, se teme por la atención humanitaria de cientos de miles de desplazados. Fuentes de la ONU aseguran que el Plan Mundial de Alimentos (PMA) ya no opera en la zona, que al menos dos hospitales han sido bombardeados y que varias sedes de organizaciones de ayuda humanitaria han sido asaltadas.
El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha vuelto a pedir a las fuerzas ruandesas que cesen en su apoyo al M23 y que se retiren del territorio de la RDC. El consejo de seguridad de la ONU ha condenado el “desvergonzado desprecio” de la soberanía y la integridad territorial congoleña por parte de las “fuerzas externas” que han penetrado en la RDC. Fuentes diplomáticas han confirmado que varias bombas han caído en campos de desplazados situados en torno a Goma, provocando la muerte de al menos diez personas y decenas de heridos.
El presidente francés, Emmanuel Macron, ha mantenido entrevistas telefónicas con el presidente congoleño, Félix Tshisekedi, y el ruandés, Paul Kagame, durante el fin de semana y ha pedido, a través de un comunicado, “el fin inmediato de la ofensiva del M23 y de las fuerzas ruandesas así como su retirada del territorio congoleño”.
La ministra de Asuntos Exteriores congoleña, Thèrese Kayiwamba, aseguró este fin de semana que el respaldo de Ruanda a los rebeldes del M23 en su avance sobre Goma era “una declaración de guerra”. Por su parte, el Gobierno ruandés rechazó mediante un comunicado “las reacciones oficiales erróneas y manipuladas” y acusó, a su vez, a Kinshasa y sus aliados, los Wazalendo, al Ejército burundés, a las fuerzas de África austral y a los soldados de la Misión de la ONU (Monusco) de haber violado el alto el fuego.
El presidente de Kenia, William Ruto, ha convocado una cumbre extraordinaria de la Comunidad de África del Este en las próximas 48 horas, a la que han sido invitados a participar Tshisekedi y Kagame. Asimismo, el consejo de paz y seguridad de la Unión Africana (UA) tiene previsto reunirse de urgencia mañana.
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