_
_
_
_

La OTAN urge a Moscú a cumplir con el acuerdo de desarme y le responsabiliza de su fin

La UE insta a los dos países a preservar el tratado para evitar un enfrentamiento entre "superpotencias" en Europa

Lluís Pellicer
La Alta Representante de Asuntos Exteriores y Defensa de la UE, Federica Mogherini, en Bucarest.
La Alta Representante de Asuntos Exteriores y Defensa de la UE, Federica Mogherini, en Bucarest.Andreea Alexandru (AP)

La Unión Europea no quiere que las hostilidades entre Estados Unidos y Rusia deriven en una segunda Guerra Fría. Y mucho menos que el continente vuelva a ser el escenario de ese enfrentamiento. El Ejecutivo comunitario, por ello, instó a Estados Unidos y a Rusia no solo a “preservar” el Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF, por sus siglas en inglés), sino también a respetarlo “por completo”, según reclamó la alta representante de Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini, ante el anuncio de EE UU de su retirada del acuerdo tras considerar que Rusia lo está incumpliendo. La OTAN, por su parte, urgió a Moscú a volver al “cumplimiento total y verificable” del acuerdo y la responsabilizó de su suspensión.

Más información
EE UU suspende un gran tratado de control de armas nucleares con Rusia
EE UU y Rusia ya no reducen sus arsenales atómicos

La posible ruptura del tratado no constaba en la agenda oficial del encuentro informal de ministros de Exteriores que este viernes se cerraba en Bucarest. Aun así, sí fue un asunto que abordaron varios jefes de la diplomacia de los Veintiocho a lo largo de la mañana. Europa no es parte en ese acuerdo, pero sí la “más beneficiada”, acertó a destacar Mogherini, de la rúbrica que en 1987 estamparon los presidentes de EE UU Ronald Reagan y de la URSS Mijaíl Gorbachov para reducir los arsenales nucleares y poner la primera piedra para acabar con años de tensiones.

Trump decidió que retiraría la piedra central de la arquitectura que dio lugar a la caída del Muro de Berlín (1989) y a la desintegración de la Unión Soviética (1991) al considerar que Rusia la estaba socavando. La violación del tratado se debe, según Trump, al desarrollo de un nuevo misil de crucero. Los aliados de la OTAN convinieron en que Rusia, en efecto, había desarrollado un sistema de armamento que “viola el tratado” y “presenta riesgos significativos para la seguridad euroatlántica”. Este viernes, en un comunicado, acusaron a Rusia de ser la “única responsable” del fin del acuerdo “a menos que cumpla con sus obligaciones”.

Seis meses para dar marcha atrás

Junto a la jefa de la diplomacia europea, Teodor Melescanu, ministro de Asuntos Exteriores de Rumania —país que ostenta la presidencia rotatoria de la UE—, resaltó que “el asunto clave” es que “ambas partes” respeten todas las cláusulas del tratado. “No queremos ver que nuestro continente vuelve a ser el campo de batalla o un lugar donde otras superpotencias se enfrentan entre ellas. Eso pertenece a otras épocas de la historia muy lejanas”, añadió Mogherini.

El proceso de retirada del tratado tiene una duración de seis meses, que la OTAN reclamó que sean empleados por Rusia para volver a su cumplimiento. En esa misma dirección se pronunció la canciller Alemana Angela Merkel, quien recordó que fue Rusia quien “vulneró” los términos del tratado y recordó que aún está a tiempo de “aprovechar” ese tiempo para “actuar en consecuencia” y evitar la retirada de EE UU, según recogió la agencia Efe.

En Bucarest, el titular de Exteriores alemán lamentó que la ruptura del INF haga del mundo un lugar “menos seguro” y propuso lanzar un nuevo debate sobre desarme. También los ministros de Austria, Hungría, Bélgica o Luxemburgo mostraron su preocupación ante una posible escalada que ponga en jaque a Europa. El jefe de la diplomacia belga, Didier Reynders, reclamó "un diálogo directo" entre Rusia y Estados Unidos que evite esa situación, que sería, dijo, un "verdadero desafío para la Unión Europea".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_