Una lección de historia para las funcionarias de Medellín que se tomaron fotos con alias Popeye
Las imágenes de tres contratistas del Ayuntamiento con el exsicario de Pablo Escobar generaron un debate que terminó con unas disculpas públicas y un recorrido por el Museo Casa de la Memoria
No es una novedad que a Jhon Jairo Velásquez, alias Popeye, el exsicario al servicio de Pablo Escobar, lo detengan en la calle para pedirle una foto o un autógrafo. Pero las imágenes de tres trabajadoras del Ayuntamiento de Medellín posando junto a él en las calles de la ciudad despertó un rechazo generalizado que trascendió como pocas veces ha ocurrido.
Popeye, que estuvo en la cárcel 23 años después de haber confesado 300 asesinatos y participado en otros 3.000, ha estado bajo la pista de las autoridades en los últimos meses por sus presuntos vínculos con grupos ilegales. Por eso, no fue menor la reacción después de que las fotos de las funcionarias con él se volvieron virales. El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, las citó en el Museo Casa de la Memoria y las acompañó en un recorrido en el que les explicó por qué Popeye, Escobar y todos esos nombres que ahora son recordados en series televisivas le hicieron tanto daño al país. El narcotráfico de los años ochenta y noventa dejó más de 20.000 víctimas, que han sido invisibles cuando la historia se le ha dejado a la televisión.
La semana pasada aparecieron unas fotos de unas contratistas con un personaje que generó mucho dolor en nuestra ciudad. Como todos ustedes, también rechacé esta conducta. Pero hice algo que creo es más poderoso. Las cité hoy para hablar con ellas y las llevé a hacer memoria. pic.twitter.com/TTMgEk1qME
— Federico Gutiérrez (@FicoGutierrez) January 3, 2018
“Pidieron perdón públicamente a la ciudad y a las víctimas. Hagamos memoria. Que nunca se nos olvide el daño que nos ha hecho el narcotráfico y la cultura de la ilegalidad. Avancemos en cultura de legalidad y cultura ciudadana”, dijo Gutiérrez después del recorrido por una de las exposiciones que retratan lo más duro de la guerra del narcotráfico en Colombia.
Las funcionarias, que estuvieron a punto de ser despedidas, aseguraron que las fotos no tenían una mala intención y reconocieron que les faltó reflexionar antes de posar junto a él. El alcalde de Medellín ha reiterado su rechazo a la exaltación de Popeye, que en su cuenta de Twitter tiene más de 50.000 seguidores y en Facebook reúne varios grupos a su favor.
En diciembre, Popeye fue descubierto por las autoridades en una fiesta de Juan Carlos Mesa, alias Tom, uno de los narcos más buscados del país, jefe de la Oficina de Envigado. Desde entonces, la Fiscalía ha pedido que se le revoque la libertad condicional de la que goza desde 2014. Según los investigadores existen pruebas para afirmar que Velásquez se ha reunido más de una vez con líderes de bandas ilegales. “Se infiere que él ha vulnerado su compromiso de no volver a delinquir. Hemos podido evidenciar que él ha seguido reuniéndose con los diferentes actores armados en esta ciudad (Medellín) para tener a su mano ese tema del narcotráfico”, ha asegurado Claudia Carrasquilla, directora especializada contra las organizaciones criminales de la Fiscalía.
Por ahora, el exsicario que lideraba una de las estructuras de Escobar sigue paseándose por las calles de Medellín, una ciudad que lleva más dos décadas intentando mostrar una cara diferente a la que las series sobre capos y narcos venden. Una tarea que no ha sido fácil, sobre todo porque un atractivo turístico, que ofrecen en paquetes de viajes, sigue siendo el recorrido por los sitios que ocupó el cartel de Medellín, liderado por Escobar.
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