Un convoy de ayuda entra en una localidad asediada en Siria

Un convoy de ayuda humanitaria de la Media Luna Roja Siria junto con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) logró entrar en la tarde de este miércoles en la cercada localidad de Moaadamiye, a 10 kilómetros al suroeste de Damasco. Con 50,000 habitantes, la población sufre el asedio intermitente del Ejército sirio desde 2012. El acuerdo respondía a las presiones por parte de la oposición siria por el levantamiento de todos los cercos del país como condición previa a su plena participación en las negociaciones de paz que finalmente han quedado suspendidas hoy en Ginebra.

“Hemos entrado con 12 camiones; 10 con comida y dos con medicamentos y material médico”, aseguraba por teléfono Pawel Krzysiek, portavoz del CICR en Siria. Miles de vecinos se agolpaban desde por la mañana a las puertas de la localidad. Tras siete horas de espera, la logística permitió que la distribución tuviera lugar en una zona tampón entre las tropas del régimen de El Asad y grupos rebeldes. La anterior distribución de ayuda humanitaria por parte de las mismas organizaciones se remonta al pasado mes de noviembre.

Varios acuerdos sellados entre insurrectos y el régimen de Damasco en 2014 lograron aflojar el aislamiento de Moaadamiya. Sin embargo, a finales de 2015, el cerco se recrudecía ante la reanudación de los combates. Las concesiones sobre el terreno parecen seguir el mismo ritmo entrecortado de los diálogos de paz ahora interrumpidos. A pesar de que el cese de los bombardeos también forma parte de los prerrequisitos para que las negociaciones de paz tuvieran lugar, este martes Moaadamiya era bombardeada por la aviación siria, al igual que la vecina y también cercada Daraya.

“Una distribución puntual de ayuda no es suficiente. Necesitamos acceso continuo o seguiremos incumpliendo nuestro compromiso para con estas gentes”, advertía Krysiek. Moaadamiya es una de las 18 poblaciones cercadas tanto por rebeldes como Ejército sirio. El hambre se ha convertido en una táctica de guerra para rendir al enemigo.

Otro convoy de ayuda puntual pudo entrar a principios de año en las localidades de Foua y Kafraya, al norte y cercadas por los rebeldes, y en Madaya, a 25 kilómetros al noroeste de Damasco y sitiada por las tropas regulares. En esta última, 46 personas habrían muerto por inanición o por falta de medicamentos, denuncia Médicos Sin Fronteras. Según Naciones Unidas, su personal en el país no puede hacer llegar ayuda a 4,5 millones de sirios, entre los que se incluyen unas 480.000 personas sitiadas.

Al tiempo que la ayuda llegaba a Moaadamiye, el Ejército sirio junto con efectivos de la milicia-partido libanés Hezbolá, lograban romper otro cerco. Esta vez el impuesto por facciones insurrectas sobre las localidades chiíes de Nubl y Zahraa durante los últimos tres años. Secundados por la aviación rusa, el régimen lograba así cortocircuitar una de las principales rutas de avituallamiento rebeldes que unían a Alepo con Turquía. Avance que reverberaba hoy en Ginebra con la suspensión de las negociaciones de paz.