Argentina nombra a su primera general en actividad

Argentina tiene por primera vez en su historia una mujer con el rango de general de las Fuerzas Armadas en actividad. En 2009, la presidenta argentina, la peronista Cristina Fernández de Kirchner, había ascendido ‘post mortem’ a ese cargo a una heroína de la independencia de su país, Juana Azurduy (1780-1862). Este miércoles, el Senado votó por unanimidad la designación como general del Ejército de una de las tres edecanas presidenciales, María Isabel Pansa, que hasta ahora era coronel.

En julio pasado, en la cena anual de camaradería de las Fuerzas Armadas de Argentina, Fernández había señalado la falta de equidad en esa institución: “En políticas de género me voy a ir con una deuda: Yo quería ver una generala, almiranta o como se le pueda llamar. Hoy, charlando con (el ministro de Defensa, Agustín) Rossi, me decía que en uno o dos años más podríamos tener una mujer con las palmas (la distinción que los generales llevan en su uniforme)”. Aquella vez añadió: “Queremos tener mujeres en la conducción de las Fuerzas Armadas. Esta es una deuda, pero estoy segura de que las mujeres que están ingresando la van a hacer cumplir”. Finalmente, la jefa de Estado se apresuró para cumplir esa deuda antes de que finalice su mandato, en diciembre próximo.

Tres semanas después de aquella cena, Fernández decretó que los profesionales de las Fuerzas Armadas que contaran con título universitario pudieran superar la barrera que por norma les impedía el ascenso a general. De este manera, el grado máximo dejó de ser exclusivo de aquellos que hubiesen cursado la carrera de las armas. Así es que no hubo que esperar uno o dos años para la promoción de la primera general sino que la jefa de Estado pudo promover a ese cargo a su edecana Pansa, que se había incorporado al Ejército como auxiliar femenino en plena Guerra de Malvinas (1982) y que es graduada en dos licenciaturas, en sistemas y en psicología.

La presidenta eliminó la norma que impedía que los profesionales llegaran a generales

Solo faltaba que el Senado ratificara el ascenso de Pansa. Este miércoles los 58 senadores presentes en la sesión, sobre un total de 72, aprobaron el nombramiento. “Son las políticas de Estado que el peronismo siempre tuvo para elevar el status de la mujer”, destacó la senadora oficialista Marina Riofrío, al recordar que su partido impulsó el voto femenino en 1947. Su colega y candidata a vicepresidenta de la opositora alianza Cambiemos, Gabriela Michetti, también celebró la designación con “alegría y emoción de saber que hoy las mujeres están tomando lugares que eran inimaginables”.