Santos busca ampliar el apoyo al diálogo con las FARC

El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, ha dado un nuevo impulso al diálogo con las FARC decidiendo una suspensión de los bombardeos contra la guerrilla —como reconocimiento por el cumplimiento de la tregua unilateral— y la constitución de una comisión compuesta por políticos y representantes de la sociedad civil que le asesoren en la fase final del proceso de paz.

La orden de Santos de suspender por un mes los bombardeos a los campamentos de las FARC ha sido calificada por el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, como una medida “adecuada” para generar mayor confianza en el proceso que ahora concentra la atención de los colombianos: bajar la intensidad de un conflicto que ha dejado 220.000 muertos en cinco décadas. Es por eso que mientras los diálogos de paz con la guerrilla continúan en Cuba, ya se empiezan a tomar decisiones para desescalar la guerra, con la idea de que en Colombia se sientan, de alguna forma, los beneficios que traería la paz.

De la Calle aclaró que la medida no se tomó a espaldas de los militares y la policía. Tampoco se frenarán sus acciones: “Seguirán combatiendo manifestaciones como la extorsión, el secuestro, el narcotráfico. No hay repliegue de las fuerzas militares, ni parálisis”.

La suspensión es una medida temporal. Su continuación depende de que las FARC persistan en la tregua. Pese al optimismo del Gobierno, las reacciones de los críticos con el proceso no se hicieron esperar. El procurador general, Alejandro Ordóñez, afirmó en un fuerte comunicado que suspender los bombardeos es “realmente un cese bilateral disfrazado” y que con ello Santos acepta esa imposición de las FARC antes de que se firme el acuerdo final.

Críticos como el expresidente Pastrana integrarán la nueva comisión

A la suspensión de los bombardeos se suma la creación de una comisión pluralista que asesorará a Santos en lo que queda de las negociaciones, y que busca atraer a sectores que han sido críticos con el proceso. Algunos como el expresidente Andrés Pastrana y la excandidata presidencial por el Partido Conservador, Martha Lucía Ramírez, aceptaron participar no sin antes advertir que su presencia no significa apoyar el diálogo. Sin embargo, el uribismo, que representa a cerca de siete millones de colombianos que votaron por Oscar Iván Zuluaga en las presidenciales, no participará. Zuluaga dijo en Twitter que quien ha hecho concesiones a la guerrilla ha sido el Gobierno: “Desminado y suspensión de los bombardeos son el cese bilateral. Las cosas hay que llamarlas por su nombre. Gobierno Santos nos ha engañado”.

En la nueva comisión también está la líder del Polo Democrático de izquierda, Clara López, que apoyó a Santos en las presidenciales para defender la negociación. “La paz es un asunto que debiera adquirir un carácter suprapartidista”, decía el senador de ese partido Iván Cepeda, en una reciente visita a Madrid, informa Silvia Blanco. A la pregunta de si la paz es posible sin el uribismo, respondió: “Lo ideal sería construir una paz con el mayor consenso posible, pero tampoco vamos a detener la posibilidad de la paz porque haya quienes se le opongan”.