Más de 300 sirios acceden a desembarcar en Chipre tras horas de negarse
Se negaban abandonar el crucero que los rescató porque su intención era llegar a Italia
Los 345 refugiados sirios rescatados el jueves por un crucero turístico accedieron este viernes a desembarca en el puerto chipriota de Limassol, tras negarse a hacerlo por varias horas. Los exiliados —293 adultos y 52 niños— no querían abandonar la embarcación porque su intención era llegar a Italia.
El crucero Salamis Filoxenia —que se dirigía a Israel con 300 ciudadanos rusos a bordo— rescató a los sirios después de que la embarcación en la que estos viajaban quedase a la deriva frente a las costas de la ciudad de Pafos, en el suroeste de Chipre. Además, las autoridades chipriotas desplazaron al lugar dos barcos guardacostas, luego de recibir por radio una llamada de socorro. En la zona se registraban en ese momento vientos de fuerza 5 en la escala de Beaufort.
El traslado a tierra de los refugiados se alargó varias horas, ya que las autoridades trataron de persuadirles y tras una larga negociación —pues en un principio solo 60 de los ocupantes quisieron desembarcar— todos los refugiados accedieron a ser trasladados a Limassol. Las autoridades chipriotas aseguraron que está previsto que los sirios sean llevados a un centro de recepción de Kokkinotrimithia, en el distrito de Nicosia.
El Mediterráneo ha estado plagado de naufragios en los últimos meses relacionados con los inmigrantes que intentan llegar a Europa desde África y el Medio Oriente. El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha informado de que más de 2.500 personas se han ahogado o han reportado perdidas en el mar este año tratando de cruzar el Mediterráneo.
La Policía chipriota abrirá una investigación para esclarecer porqué quedaron varados e identificar a los traficantes, ya que el capitán del barco pesquero abandonó la embarcación cuando quedó a la deriva. Según la prensa local, el coste del viaje habrían sido 6.000 euros para los adultos y 3.000 para cada niño bajo la promesa de llegar a Sicilia. Siria está a unos 105 kilómetros de
Chipre.
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