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Artistas y diseñadores jóvenes ganan espacios en Lima

Ferias y exposiciones independientes surgen por Navidad con obras de artistas jóvenes no disponibles en tiendas

Joan y Michelle, artistas plásticos
Joan y Michelle, artistas plásticosJoan Bryam

El pretexto para encontrar clientes es la Navidad. La mayoría de los expositores en ferias que duran de tres a nueve días a fin de diciembre tienen una marca en Facebook, un logo, pocas unidades producidas por modelo, corta trayectoria y les falta local para vender. Carol Fernández, una de las organizadoras de Perú Independiente, se cansó de participar en ferias en las que los productores escatimaban en gastos de publicidad: “no tenían idea para hacer unos buenos volantes”, comenta al lado de 66 puestos de ropa, diseño, arte utilitario y alimentación, instalados en la cancha de fútbol de un club de trabajadores de telefonía, en la zona menos bohemia del distrito de Barranco.

Uno de los ilustradores de moda, Elliot Túpac, dicta un taller gratuito de lettering (arte tipográfico) a unos 25 jóvenes en un auditorio. Túpac ha logrado que la tipografía y los colores fosforescentes de los carteles de música chicha de los años 80 se conviertan en un referente artístico en Lima y allí está, bebiendo una cremolada de frutas mientras enseña. Minutos después, Lucía Cuba interviene en una conversación sobre moda: es la diseñadora peruana que ha vestido a Lady Gaga con una prenda que alude a la ley general de salud y las esterilizaciones forzadas durante el gobierno de Alberto Fujimori.

“Tenemos amigos músicos que nos cobran menos que en un concierto, así ofrecemos gratis lo mejor de la cultura independiente. Proyectamos documentales, el domingo habrá circo, un taller de confección de marionetas, otro de fanzine y otro de reciclaje para niños”, anunciaba Fernández, cuya marca Amapolay es de camisetas serigrafiadas. “Si no remato, me mato”, dicta un cartel en su puesto de venta de ropa.

Los expositores “viven de lo que hacen”, explica la artista plástica y promotora de Perú Independiente, quien añade que esta vez han comprado los toldos para no depender de ninguna municipalidad “y autogestionar otros proyectos más adelante. "Quizá no tengamos ganancia, pero la idea es que esto siga creciendo”, afirma entusiasta cerca de relojes de pared hechos de discos de vinilo, billeteras de material reciclado, CDs, libros y moda alternativa.

A una hora de distancia, en el centro de la ciudad, Contra Mercado Independiente, reunía otro grupo de creadores y vendedores que competían con otras dos ferias colindantes de comerciantes tradicionales. La Municipalidad de Lima convocó a más de 60 feriantes, entre ellos, jóvenes artistas plásticos, promotores culturales y coleccionistas de vinilos. La reconocida ilustradora Sheila Alvarado, creadora de la serie ‘Limeña Girl’, ofrecía pins, postales, libretas y cuadros, al lado de otros artistas recién egresados de la Escuela Nacional de Bellas Artes. Uno de ellos es Gian Bacilio Akamine quien, bajo el sello Gamba, ofrecía cojines decorativos serigrafiados y unos monederos bordados por su madre sobre retazos reciclados de tela. “Gambate es una palabra japonesa que significa esfuerzo”, informa en medio de objetos con diseños psicodélicos. Un monedero con el rostro del poeta peruano César Vallejo llama la atención.

Pocos metros más allá, tres ilustradores más jóvenes comparten un stand: son Michelle U., Joan Bryam y Alexandra, también de Bellas Artes. La pieza más barata cuesta 0.60 centavos de dólar y es un adorno de cartón para el árbol de Navidad. Joan cuenta que les está yendo bien: “Cuando ya vamos a cerrar viene más gente”. Ofrecen cuadros enmarcados, dominós guardados en un estuche de tela, imanes, tarjetas de Navidad, camisetas. Muestran de muy buena gana su trabajo a los visitantes, incluso entregan un volante de la feria a la que irán en Miraflores cuando termine Contra Mercado Independiente. “Voy a pintar un mural”, invita Michelle.

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Mientras tanto, Lici Ramírez comparte un stand de discos de vinilo con sus libretas y cuadernos ilustrados con tinta china o grabados: su marca es ‘Corazón Carnaval’. “Se llama así porque es el tiempo de las fiestas en que las personas se liberan y yo estoy pasando por un tiempo de honestidad brutal”.

Los puestos de vinilo y de artes plásticas abundan, sin embargo, hay algunos de editoriales nuevas y pequeñas, como Paracaídas, donde el autor Aldo Pancorbo espera a algunos amigos para firmar su segunda novela recién lanzada, ‘La falsa despedida’. Un taller de reciclaje para niños había terminado minutos antes.

Contra terminó el sábado 21, un día muy esperado por los expositores, pues la feria empezó entre semana y había expectativa de que llegaran más visitantes. Ese día empezó la Antiferia Navideña, en el distrito de Miraflores, bajo el lema “Emo, punk, metalero, hipster, fresa… acá si te queremos”. En la Antiferia tuvieron éxito los talleres gratuitos de serigrafía, comic, circuitos sonoros, stencil (para diseñar camisetas) y para el martes 24 programaron uno de creación de personaje (comic) y de encuadernación. Los personajes en cartón de Mundo Crayola estaban entre las creaciones originales, dado que había mucha venta de segunda mano.

 La víspera de la Navidad suele ser una temporada de comercio descontrolado, pero algunos artistas y diseñadores peruanos de clase media han aprovechado el momento para darse a conocer sin pasar por intermediarios. Así, el dinero llega también a los creadores.

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