Brasil defiende que su agencia de inteligencia solo realizó contraespionaje
El ministro de Justicia dice que EE UU cometió "violaciones que afectan a la soberanía nacional" El diario 'Folha de São Paulo' revela vigilancia a agentes franceses en el primer Gobierno de Lula
El ministro de Justicia de Brasil, Eduardo Cardozo, que podría ser convocado por el Congreso para dar explicaciones sobre los actos de espionaje realizados por la Agencia Brasileña de Inteligencia (Abin) a diplomáticos y dependencias de varios países, se ha adelantado al afirmar que lo que Brasil llevó a cabo fueron labores de “contraespionaje”, una “situación completamente diferente” a la realizada por Estados Unidos con Brasil.
“Lo que nosotros tuvimos [por parte de EE UU] fue una violación del secreto, de las reglas de la Constitución brasileña. Es decir, se violaron mensajes telamáticos y llamadas telefónicas, violaciones que afectan a la soberanía nacional”, dijo Cardozo.
Por el contrario, según el ministro, lo que hizo Brasil con otros países extranjeros se realizó “dentro del territorio nacional” y fue “absolutamente legal, dentro de las reglas”. “Cuando usted considera que existen espías de potencias extranjeras actuando en Brasil ¿qué hace? ¿las deja que espíen? No, usted lleva a cabo una acción de contraespionaje”.
Cardozo recordó que todos los países llevan a cabo acciones de ese tipo. “Lo que yo no puedo hacer es violar los derechos de las personas, la soberanía de las personas. Esa me parece una diferencia crucial. Si no hiciésemos esa distinción va a dar la impresión de que estamos usando el mismo método que nosotros recriminamos. Y eso no es cierto”, afirmó en respuesta a las revelaciones publicadas por el diario Folha de São Paulo sobre las acciones de la Abin.
Un portavoz del Departamento de Estado de EE UU, preguntado este martes por EL PAÍS, dijo que "todas las naciones recopilan información sobre inteligencia extranjera". "Brasil y EE UU son socios y nos une una fuerte relación basada en la cooperación y en otras muchas áreas en las que compartimos mutuos intereses", añadió.
De los cinco países que estuvieron bajo las acciones de espionaje de Brasil: Rusia, Irán, Irak, Estados Unidos y Francia, solo Irán ha advertido de que pedirá explicaciones a las autoridades brasileñas. “El espionaje es condenable en todas sus formas. Estamos informados de lo sucedido y estamos intentando discutir el caso con las autoridades brasileñas”, dijo un portavoz del Gobierno de Teherán. El ministro Cardozo se mostró convencido de que las acciones de “contraespionaje” llevadas a cabo por la Abin “no deteriorarán la imagen de Brasil” en el extranjero.
Este martes salió a la luz que la actividad de espionaje promovida por la Abin alcanzó a agentes del servicio secreto de Francia en la base de lanzamiento de satélites de Alcântara en Maranhão, durante el primer Gobierno del expresidente Lula da Silva en 2003.
El diario Folha de São Paulo, que tuvo acceso a documentos secretos de Abin, informa de que los servicios secretos brasileños llegaron a sospechar que el accidente que en 2003 mató a 21 personas, entre ingenieros y técnicos del Comando general de Tecnología Aeroespacial (CTA), por una explosión podría haber sido un sabotaje por parte de agentes secretos franceses.
Ante la sospecha, que resultó falsa ya que la explosión fue provocada por un incidente eléctrico que causó la quema anticipada de dos propulsores de cohetes, la Abin realizó por lo menos tres operaciones de contraespionaje cuya mira eran los agentes secretos franceses y sus contactos brasileños y extranjeros. La Abin calificó la acción como “red de espionaje” de la Dirección General de Seguridad Externa (DGSA), la agencia de inteligencia de Francia, activa en São Paulo y. Maranhão.
Un exjefe del GSI (Gabinete de Seguridad Internacional) ha confirmado que el Gobierno brasileño conocía el espionaje internacional en Alcântara. La localización de la base espacial siempre se ha considerad estratégica, ya que es una de las mejores del mundo para el lanzamiento de cohetes con satélites comerciales por la proximidad con el Ecuador. Al parecer los lanzamientos desde Alcântara economizan hasta un 30% de combustible.
La base brasileña, que está siendo reconstruida, podría convertirse en la única capaz de competir con el Centro Espacial de Kourou, localizado en la Guinea Francesa, territorio fronterizo con Brasil y que pertenece a Francia. Por ello, desde 2002 la Abin espió la movilización de agentes franceses, a los que llegó a fotografiar.
La Abin, según los documentos en posesión del diario Folha, espió también a órganos de cooperación y cultura relacionados directamente con la embajada y consulados de Francia en Brasil como el Cendotec (Centro Franco-Brasileño de Cooperación Técnica y Científica), que pertenece al consulado francés en São Paulo, y el Inpe (Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales). Los servicios secretos brasileños produjeron al menos ocho documentos sobre el caso de Alcântara.
Antenas de radio estadounidenses en Brasil
Después de conocerse que Brasil también espió dependencias de la embajada de Estados Unidos en el país en 2003, la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) de Brasil ha revelado el misterio de esas salas secretas, objeto del espionaje, que usó la embajada estadounidense en un centro comercial de Brasilia.
Anatel informó al diario Folha de São Paulo de que en aquellas salas “sin luz” y hoy blindadas con rejas de hierro existen diez antenas de comunicación. El funcionamiento de las mismas habría sido autorizada por la propia agencia de telecomunicaciones para, en un principio, un servicio privado de radio.
Estados Unidos usa hoy frecuencias exclusivas de radio para garantizar una comunicación privada y segura. Se trata, según el argot de Anatel, de “estaciones de servicio limitado privado”. Existen 38 en Brasilia, 28 en Recife, 26 en Río de Janeiro y 22 en São Paulo, informa el diario paulista. Algunas de ellas están instaladas incluso en coches privados u oficiales.
La embajada de Estados Unidos en Brasil ya ha negado que las salas espiadas por la Abin estén relacionadas con las actividades de espionaje de la CIA, la agencia de inteligencia americana, o la NSA, la Agencia de Seguridad Nacional que vigila las comunicaciones telefónicas e internet.
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