Ollanta Humala gana terreno en las encuestas una semana antes de las elecciones en Perú

Ollanta Humala sigue ganando terreno en las encuestas en vísperas a la elecciones presidenciales peruanas. A nueve días de la primera vuelta, a celebrarse el 10 de abril, el excomandante del Ejército y ahora candidato de la alianza nacionalista Gana Perú ha consolidado, por primera vez en la campaña, un liderazgo claro. Dos sondeos de intención de voto difundidos hoy lo colocan a la cabeza, seguido de cerca por tres candidatos empatados en términos estadísticos, por lo que es imposible a estas alturas vaticinar quiénes disputarán la presidencia en una segunda vuelta prácticamente inevitable.

Se trata, sin dudas, de la campaña electoral más ajustada de la historia del país. El estudio de la empresa Datum, publicado por el diario Perú.21 , le otorga 21,4% en una simulación de voto, una diferencia de casi cuatro puntos porcentuales desde su anterior sondeo, mientras que la encuesta del Instituto de Opinión Pública de la Universidad Católica le atribuye 26,9% de los votos válidos .

Pelean el segundo lugar el expresidente Alejandro Toledo, Keiko Fujimori (hija del convicto ex presidente) y Pedro Pablo Kuczynski, ex primer ministro de Toledo y ahora candidato de Alianza por el Gran Cambio, quien también ha crecido con fuerza en las últimas semanas. Las dos encuestas difundidas el viernes colocan a estos tres candidatos en un virtual empate técnico en torno al 19%, a la vez que confirman el marcado descenso de Luis Castañeda, el exalcalde de Lima, que inició la campaña presidencial como líder con una intención de voto de alrededor de 24% y ahora apenas logra la mitad, que lo coloca en quinto lugar y cada vez con menos posibilidades.

El avance de Humala en las preferencias ha causado nerviosismo en el resto de candidatos y también en agentes financieros y algunos medios de comunicación, debido a que es el candidato con el discurso más reformista y el único de izquierdas de entre quienes tienen posibilidades de victoria. Su plan de gobierno propone una revisión del modelo económico que ha permitido al país más de 10 años de crecimiento para hacer más equitativa la distribución de la riqueza, una reforma constitucional, la revisión de los tratados de libre comercio y contratos firmados por el Estado con empresas privadas y la intervención gubernamental en sectores considerados estratégicos, como la energía, los puertos y las telecomunicaciones, en muchos casos en manos de empresas extranjeras. Aunque ha moderado su discurso respecto al 2006, cuando fue derrotado por Alan García en segunda vuelta, sigue siendo visto por sus opositores como un radical.

En contraposición al candidato del nacionalismo, los otros cuatro aspirantes plantean, con matices, la continuidad de la política económica. De ellos, la que tiene el electorado más fiel es Keiko Fujimori, con alrededor de 20%, los simpatizantes que añoran a su padre, que gobernó entre 1990 y 2000. Toledo, en cambio, viene cayendo después de ser holgado líder hace apenas unas semanas, y ha replanteado su discurso, que fue calificado de extremadamente liberal por propuestas como la despenalización del aborto y la unión homosexual, para presentarse como el "voto seguro", amparado en el buen recuerdo que se tiene de su gestión, entre 2001 y 2006.

Pedro Pablo Kuczynski, por su parte, aspira a ser la sorpresa de los comicios. Hace dos meses, el ex primer ministro de Alejandro Toledo, un economista que se ha reconocido a sí mismo como millonario y tiene empresas y propiedades en Estados Unidos, solo lideraba las preferencias en el denominado sector socioeconómico A, la población con más altos ingresos. Con una intensa campaña ha logrado bajar al llano y meterse en la pelea, al subir de 4% a 17,5%, según la encuesta de Datum.

Entre tanta incertidumbre, lo cierto es que el avance sorprendente de Humala ha trastocado lo que se vaticinaba como una elección relativamente tranquila entre varios candidatos que en resumidas cuentas iban a mantener el modelo económico del país.

Entre los que han expresado preocupación destaca el premio Nobel de literatura Mario Vargas Llosa , quien anteriormente consideró que una segunda vuelta entre Humala y Fujimori sería como elegir "entre el cáncer y el sida" y el jueves se reafirmó. "Como muchos peruanos veo con muchísima preocupación lo que pueda ocurrir el 10 de abril, que se vayan a destruir estos diez años de muy buena racha que tiene el Perú, de muy buena orientación", declaró en una entrevista a un canal de televisión.