Las tropas de EE UU lanzan una amplia campaña militar en el norte y el noroeste de Irak
La denominada operación 'Escorpión del desierto' para neutralizar a grupos armados comenzó de madrugada en Faluga
Las tropas de Estados Unidos han emprendido esta madrugada una amplia campaña militar en el norte y el noroeste de Irak contra las fuerzas leales al régimen del derrocado Sadam Husein. El alto mando aliado ha confirmado esta operación en busca escondites de grupos armados, que denomina Escorpión del desierto, pero no ha precisado los lugares concretos donde se desarrolla. Sin embargo, varios testigos hablan de la presencia de centenares de soldados en Faluga.
"La operación 'Escorpión del desierto' empezó anoche y continúa", ha indicado esta mañana el sargento Brian Thomas, que ha preciado que se desarrolla "principalmente en el norte y el noroeste de Irak". Aunque Thomas no ha precisado las localidades que son blanco de la campaña militar, varios testigos han señalado que centenares de soldados estadounidenses han penetrado en la ciudad iraquí de Faluga, a unos 50 kilómetros al oeste de Bagdad, en busca de efectivos armados.
La campaña, que no ha encontrado resistencia hasta el momento, coincide con el final de la operación Península, el ataque a gran escala contra los fieles a Husein, que concluyó el pasado jueves, según ha informado el Comando Central estadounidense (Centcom). "La Cuarta División de Infantería y unidades de apoyo de la Fuerza de Ataque Ironhorse (Caballo de Hierro) concluyeron el pasado 12 de junio una operación masiva", indica el Centcom en un comunicado.
Más de cien muertos
Dicha operación, llevada a cabo en una región de mayoría suní, en el norte de Bagdad, tenía como objetivo "capturar o aniquilar a terroristas", según el Centcom. El comunicado añade que cerca de 400 personas fueron detenidas durante la operación y fueron requisadas grandes cantidades de armas y municiones. Además, las fuerzas estadounidenses mataron al menos a 113 personas desde el comienzo de la operación Península.
Además, esta nueva operación se produce un día después de que expirara el sábado un ultimátum dado por las tropas estadounidenses para que los iraquíes entreguen las armas que posean de forma ilegal. El ultimátum no parece haber dado resultados, ya que sólo se han entregado 800 armas de las miles que circulan ilegalmente por el país. Por otro lado, la televisión árabe Al Yasira ha informado de que el cuartel de las tropas de EE UU en la ciudad de Ramadi, al noroeste de la capital, ha sido atacado esta mañana con morteros. Según la emisora, el ataque ha provocado un incendio en el edificio, antigua sede de los servicio de Inteligencia de Husein. Sin embargo, esta información que no ha sido confirmada por otras fuentes hasta el momento.
En las últimas dos semanas, han sido numerosos los ataques sufridos por las fuerzas estadounidenses desplegadas en Irak, especialmente en el centro del país. Así, varios soldados de EE UU han resultado muertos o heridos en emboscadas tendidas por grupos antiestadounidenses en Faluga y Ramadi, así como en Tikrit y Balad, lo que llevó a las fuerzas ocupantes a reforzar su presencia en estas zonas. Estas agresiones son atribuidas por los mandos militares estadounidenses a "fieles al partido Baaz", en referencia al ex partido único iraquí, ahora disuelto, pero de momento no está claro si existe alguna coordinación entre todas esas acciones armadas.
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