Bush anunciará ante la ONU un ataque a Irak aunque no tenga el apoyo de sus aliados
Powell asegura que EE UU desarmará a Sadam Husein con o sin inspectores
El presidente estadounidense, George W. Bush, aprovechará su discruso previsto para la próxima semana en la sede de Naciones Unidas en Nueva York para lanzar un ultimátum a sus aliados para que tomen acciones contundentes para acabar con el régimen de Sadam Husein. De no ser así, EE UU lanzará un ataque unilateral a Irak, según publica en su edición de hoy el diario The Washington Post, que cita fuentes de la Casa Blanca.
La opinión dominante en el Gobierno estadounidense, según el diario, es que el tiempo de las inspecciones de armamento ha terminado y que el presidente iraquí, Saddam Hussein, debe ser derrocado.
Bush transmitirá ese mensaje durante su discurso, el próximo jueves, 12 de septiembre, ante la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, según señala el rotativo.
Sin embargo, agrega el diario, los responsables de la Casa Blanca están convencidos de que trabajar con las Naciones Unidas, al menos en principio, sería preferible y podría finalmente facilitar en el futuro una decisión favorable a una intervención militar internacional contra Bagdad.
EE UU desarmará a Irak
Por otro lado, el secretario de Estado de EE UU, Colin Powell, ha acusado al régimen de Sadam de haber violado todas las resoluciones de la ONU para desarrollar armas de destrucción masiva. Por ello ha dicho que su país tiene como objetivo desarmar a Irak para lo que los inspectores de Naciones Unidas son sólo una forma subsidiaria de conseguirlo, según ha declarado en una entrevista concedida al diario Le Monde.
El jefe de la diplomacia estadounidense ha dicho que "si los inspectores tienen un papel en el desarme, tanto mejor. Pero no debemos perder de vista que el problema es el desarme" de Irak. Powell dice que la vuelta de los funcionarios de la ONU es una forma de conseguir el desarme de Irak y derrocar al régimen de Sadam Husein es otra. Tampoco descarta unir ambas posibilidades para lograr los objetivos de Washington.
El secretario de Estado afirma que las consultas de EE UU van a intensificarse, pero deja claro que Bush considera que Sadam Husein y su régimen "plantean un problema que debe ser tratado". En las horas previas a la reunión del presidente con el primer ministro británico, Tony Blair, Powell rechaza las críticas europeas a la acción unilateral de EE UU y asegura que esa actitud "no refleja la naturaleza de nuestra relación".
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