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Peras pochadas en azafrán y cardamomo

Un postre con un toque dulce y especiado que podemos tomar tal cual o usar en ensaladas, tostadas o acompañamiento para platos de pato o cerdo.

Lo importante es que no te queden blandurrias
Lo importante es que no te queden blandurriasALFONSO D. MARTÍN
Alfonso D. Martín

Las peras al vino tinto son típicas de La Rioja, aunque se extendieron hace tiempo por todo el territorio gastronómico español como parte de la incontestable tradición culinaria castellana. Lo viejuno vuelve, como todo lo que es cíclico, revisado y transformado; a veces como alegre reinvindicación de lo que nunca debió irse y otras con un aire petulante y moderno que lo único que consigue es sacarnos los colores, por ese intento de marcar distancia y pensar que todo se puede mejorar.

Vamos a preparar una versión que utiliza la misma técnica que se usa para la receta citada anteriormente, pero con sabores diferentes y libre de alcohol. Pocharemos las peras muy lentamente en un almíbar especiado con cítricos y cardamomo y el potente aroma floral del azafrán, que bañará a las peras con un atractivo color dorado.

El resultado son unas peras perfectas para un postre, pero que, gracias a las especias, pueden combinar perfectamente en un plato salado, como puede ser una tostada con requesón y pimienta negra, una ensalada de rúcula y escarola con aceitunas kalamata e hinojo o incluso un solomillo de cerdo o un magret de pato con puré de patata o boniato.

Dificultad: La de vigilar que no se pase la cocción de las peras y acaben blandurrias.

Ingredientes

  • 1k de peras de conferencia peladas
  • 250 g de azúcar blanco
  • 2 cucharadas de granos de cardamomo verde
  • 1 cucharada de semillas de cilantro
  • 3 piezas de anís estrellado
  • 1 ramita de canela
  • 0,3 g de azafrán en hebras (el paquetito estándar)
  • La piel de una naranja
  • La piel de un limón
  • Unos 2,5 l de agua aproximadamente (según la olla; lo necesario para cubrir las peras)
  • ¼ de cucharadita de sal

Instrucciones

1.
Pelar las peras dejando el rabillo y sumergirlas en agua fría con unas rodajas de limón para evitar que se oxiden.
2.
Romper ligeramente los granos de cardamomo (yo usé un mortero) y añadirlos junto al resto de las especias (excepto el azafrán) y las pieles de cítricos a una olla. Tostar a fuego bajo-medio sin parar de mover hasta que huela.
3.
Añadir 250 g de azúcar blanco y suficiente agua para disolverlo.
4.
Triturar con ¼ de cucharadita de sal las hebras de azafrán.
5.
Añadir el azafrán, las peras y suficiente agua para cubrirlas. Llevar a ebullición y cocinar a fuego bajo, con tapa, aproximadamente unos 45 minutos, o hasta que las peras se vuelvan tiernas y melosas pero no se deshagan (vigilar a partir de los 30 minutos de cocción).
6.
Retirar las peras con cuidado y reducir el almíbar de azafrán, sin tapar, 10 minutos más con el fuego alto. Conservar en un tarro con el propio almíbar en el que las hemos cocinado. Se pueden consumir directamente, pero tras dos días estarán mejor.

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Sobre la firma

Alfonso D. Martín
Es cocinero, asesor gastronómico y fetichista de especias y fermentados. De pequeño gateaba al bar de al lado de casa para pedir un huevo duro y después empezó a tener dolor abdominal continuo por echarle picante a todo a escondidas de su madre. Si profanar recetas clásicas fuese un pecado, ya habría pasado los nueve círculos del Infierno de Dante.

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