En jaque el futuro de un centro de rehabilitación de aves en Majadahonda

Águilas, lechuzas, tortugas y otros animales silvestres están en medio de una discusión jurídica entre el Ayuntamiento de Majadahonda y el Grupo de Rehabilitación de la Fauna Autóctona y su Hábitat (Grefa) sobre el año de vencimiento de un convenio de colaboración que ha permitido a la ONG trabajar en unas instalaciones municipales en el Monte del Pilar. El convenio se firmó en 1998 por un periodo de 25 años y por tanto, amparado en ese plazo, el Ayuntamiento ha anunciado que el contrato vence el próximo 28 de diciembre. Sin embargo, la ONG defiende que finaliza en 2032 porque solo se les entregaron las instalaciones oficiales prometidas hasta el año 2007.

Ernesto Álvarez, presidente de Grefa, se prepara con su equipo para una reunión este miércoles con la alcaldesa Maria Dolores Moreno (PP). “Esperemos que podamos llegar a un acuerdo, porque esto es un atropello. Queremos saber qué tiene pensado el Ayuntamiento y estamos abiertos a concertar cómo trabajar juntos de manera ordenada”, dice Álvarez vía telefónica y agrega que llevaban pidiendo cita a la administración desde la legislatura pasada, cuando el alcalde era José Luis Álvarez (PP). Esta semana, las partes discutirán el futuro de la ONG y de los más 50 profesionales que trabajan en proyectos de conservación, atención veterinaria, reintroducción de especies a su hábitat natural, reforzamiento de poblaciones silvestres y cría en cautividad. Más de 7.000 animales ingresan cada año a Grefa a través de intervenciones del equipo de rescate o de traslados que hacen ciudadanos, agentes forestales o cuerpos de seguridad del Estado.

El Ayuntamiento ha afirmado, a través de un comunicado, que “velará por el bienestar de los animales tras el fin del convenio” y que se ha comunicado a Grefa el vencimiento del acuerdo “con antelación suficiente para que arbitren las medidas oportunas para la protección efectiva de los animales que se encuentran actualmente en las instalaciones”. Fuentes municipales aseguran que las especies no quedarán desprotegidas y hay “recursos suficientes” para cuidarlos. “El Ayuntamiento está en coordinación con la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid sobre este asunto”, ha concluido la administración.

Sin embargo, Grefa responde que los proyectos “no se pueden extrapolar a nadie” por el nivel de experiencia y procesos que han consolidado desde 1981, cuando se fundó la organización y comenzó a operar en una primera sede en una zona conocida como Saltos del Sil, también en Majadahonda. La entidad ecologista tuvo que trasladarse de la parcela, que era propiedad de Iberduero, y llegó en 2007 a Monte del Pilar a través del convenio que hoy genera discordia. Álvarez argumenta que el tiempo del convenio empieza a contar “desde el día en que se usa” la instalación prometida. “La obra [del centro en Monte del Pilar] empezó en 2005 y se entregó en 2007″, dice su presidente.

Grefa maneja proyectos especiales para el cuidado de especies amenazadas como el buitre negro, el águila de Bonelli, el pigargo europeo, el águila imperial y el águila real. Álvarez explica que la actual sede, donde queda el Hospital de Fauna Salvaje, es clave para articular todos los proyectos. “Si el convenio se acaba de esta forma, derrumban todo por completo”, dice el presidente y zanja la discusión, “no nos vamos de aquí de ninguna manera. Si esto de las fechas no se soluciona, iremos por la vía penal”.

El Ayuntamiento, por su parte, se sostiene en que el convenio termina este mismo año porque el documento de 1998 decía que la vigencia entraba en rigor al momento de la firma. Además, se respalda en una sentencia de 2022 que responde a una denuncia de Grefa contra la administración por una falta pagos y que, además, se pronuncia sobre su reclamo de que los 25 años del convenio cuentan a partir de 2007: “(...) no puede compartirse tal conclusión, carente de fundamento y soporte jurídico”.

Las cartas están puestas sobre la mesa para el encuentro de este miércoles. Una de los temas será la nueva figura que se adopte tras el fin del convenio. Fuentes del Ayuntamiento, en todo caso, explican que una de las opciones a evaluar es abrir un nuevo concurso para la gestión de la sede de Monte del Pilar al que Grefa puede aplicar.

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