El PP intenta aminorar la frustración que corre en el partido tras las elecciones generales. Su presidente, Alberto Núñez Feijóo, insiste en que todavía hay opciones para conformar una mayoría de investidura. Un escenario prácticamente descartado tras el portazo del PNV. Donde sí hay margen de maniobra para levantar el ánimo de las filas populares, y de mostrar músculo de puertas para fuera, es en la Región de Murcia y Aragón. En ambas comunidades queda un mes para que Fernando López Miras y Jorge Azcón —sendos candidatos del PP y ganadores por mayoría simple de los comicios del 28-M—, cierren un acuerdo de Gobierno con otras fuerzas parlamentarias antes de que expire el plazo para convocar unas segundas elecciones. Ambos dependen de la abstención de Vox y tanto uno como otro han tardado apenas unas horas, tras el cierre de las urnas del 23-J, en tratar de retomar los contactos con la formación ultra y acelerar las negociaciones.

Azcón y López Miras se encontraron la tarde del lunes en Madrid, alrededor de Feijóo y junto al resto de barones, durante la reunión de la Junta Directiva Nacional celebrada en la sede del partido. En el cónclave, el líder del PP reconoció la frustración por los resultados del domingo. Un sentimiento compartido por los dirigentes populares. Antes de entrar al edificio de la madrileña calle de Génova, López Miras advirtió que Vox debía “replantearse su estrategia” porque, tras haber estado “bloqueando” la formación de gobierno en Murcia, los ultras han descendido hasta el tercer puesto en estas elecciones generales, frente a los resultados de noviembre de 2019, cuando Vox fue el partido más votado en la Región. La investidura de López Miras fracasó en segunda vuelta el pasado día 10 al negarse a pactar un gobierno de coalición con los ultras. Una exigencia que los de Santiago Abascal impusieron tras quedar fuera del reparto de la Mesa de la Asamblea murciana.

Este martes, el PP de la Región de Murcia ha propuesto a Vox —“a instancias” de López Miras— celebrar una nueva reunión, este miércoles, para tratar de alcanzar un acuerdo de investidura. Según fuentes de su gabinete, el presidente en funciones pretende así “desbloquear la situación” y evitar la repetición electoral. El plazo para convocar unas segundas elecciones acaba el 7 de septiembre. Hasta ahora, las condiciones de los ultras para apoyar a López Miras incluían ocupar su vicepresidencia y dos consejerías. Enfrente, los populares han reiterado su intención de gobernar en solitario. Vox pedía además una serie de acuerdos programáticos, como la derogación de la Ley de Protección del Mar Menor, otra línea roja para el PP.

Pero la coyuntura de este martes es muy distinta a la de hace 15 días, cuando Feijóo se veía presidente y compensó la imagen de entrega de los pactos autonómicos de Extremadura y Comunidad Valenciana con el choque materializado en la Región de Murcia. En cualquier caso, el PP murciano volverá a proponer mañana un acuerdo programático, que incluye el ofrecimiento de “cargos de representación parlamentaria e institucional” e insisten en “el compromiso” de un Ejecutivo en solitario. El portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Joaquín Segado, ha telefoneado al diputado regional de Vox, Rubén Martínez Alpáñez, para cerrar la reunión de mañana en la Asamblea Regional, indican fuentes del equipo de López Miras. Desde el gabinete de prensa de Vox en Murcia señalan que el PP no ha contactado con el presidente regional del partido, José Ángel Antelo, y que, por lo tanto, no se pueden dar por enterados de una reunión por lo que digan los medios de comunicación. Vox continuará mañana con su agenda, añaden las mismas fuentes. A última hora de la tarde, López Miras ha convocado un acto en Murcia mañana por la mañana, mientras que la Asamblea, donde habían pedido la reunión, está en Cartagena. A través de la red social Twitter, Antelo ha censurado, después, que “López Miras convoca las reuniones a través de los medios de comunicación, ver para creer”.

Según fuentes del PP murciano, se contemplaba ceder alguno de los puestos de la Mesa de la Asamblea Regional, de la que Vox había quedado fuera, así como el senador por designación autonómica. Abascal y Feijóo mantuvieron este lunes una primera conversación a cuenta de los resultados del 23-J, después de que el líder de Vox cargase en la noche electoral contra el presidente del PP, a quien acusa de haber influido en su pérdida de 600.000 votos y 19 escaños por su campaña del “voto útil”. Sin embargo, el secretario general de Vox, Ignacio Garriga, afirmó este lunes que van a “hacer todo” lo que está en su “mano” para fraguar acuerdos en Murcia y en Aragón porque “lo merecen los españoles”.

Azcón: “No descarto ningún escenario”

En Aragón, el candidato del PP al Gobierno, Jorge Azcón, ha anunciado en la mañana de este martes que retoma la ronda de contactos para intentar formar gobierno en la comunidad. En un inicio, el presidente del PP aragonés manifestó su intención de gobernar en solitario, pero este martes no ha sido tan explícito. “No descarto ningún escenario de futuro en el gobierno”, ha dicho en una conferencia de prensa Azcón, que ya otorgó la presidencia de la Mesa de las Cortes de Aragón a los ultras.

El candidato ha asegurado que este martes llamaría a los portavoces de Vox, de Aragón-Teruel Existe y del Partido Aragonés, formaciones que mostraron su predisposición a colaborar en “la gobernabilidad” del territorio en la primera ronda de contactos celebrada tras los comicios, para alcanzar un acuerdo. Aragón-Teruel Existe ya ha avanzado que no votará a favor de un gobierno de coalición de PP y Vox, pero que sí se abstendrían para investir a Azcón en solitario.

El PP tiene hasta el 26 de agosto para evitar que se convoquen unas segundas elecciones. “Aquí no va a haber repetición electoral”, ha añadido desde Zaragoza Azcón, que ha justificado sus movimientos futuros en la necesidad de defender a Aragón de la situación “predominante” de Bildu y Esquerra por la “predisposición” de Pedro Sánchez a entenderse con ambas formaciones tras las elecciones generales. En medio del bloqueo de las negociaciones de Feijóo para su propia investidura, el PP de Aragón y el de la Región de Murcia pisan el acelerador.