Los equipos de rescate confirman que no hay cadáveres en los primeros 50 vehículos localizados en el aparcamiento de Bonaire

Seis días después del inicio de la dana que se ha cobrado la vida de al menos 210 personas en la provincia de Valencia, las tareas de desescombro y búsqueda de desaparecidos en los municipios más afectados continúan, centradas ahora en el vaciado de túneles y aparcamientos subterráneos que quedaron anegados por las lluvias torrenciales. Tras un fin de semana de dolor ciudadano y máxima tensión política, con una explosión de ira entre los afectados que se materializó en los incidentes vividos en Paiporta, el lunes ha amanecido con miles de personas intentando recuperar su normalidad de vuelta al trabajo mientras siguen pendientes de la recuperación de los municipios golpeados por una de las peores catástrofes naturales de la historia de España. Y, en medio de esa desolación, el lunes ha traído también una noticia esperanzadora.

La expectación en torno a los trabajos de búsqueda de víctimas era máxima desde primera hora de la mañana frente al aparcamiento subterráneo del centro comercial de Bonaire, en Aldaia, por su gran capacidad. Sin embargo, y a pesar de la alarma difundida en los últimos días en las redes sociales, los 80 bomberos llegados desde Valladolid, La Rioja, Salamanca y Huelva, junto al medio centenar de militares de la UME que trabajan sobre el terreno, creen que el escenario es relativamente optimista. Fuentes policiales han confirmado pasadas las 11.00 que se habían inspeccionado ya 50 coches en el interior del aparcamiento sin que se haya encontrado ningún cadáver en su interior. El portavoz del Consorcio de bomberos de Huelva, Rafael Sancha, ha informado cerca de las 18.30, tras realizar una nueva batida ese medio centenar de vehículos estaban “totalmente revisados señalizados y descartados”. “No se ha encontrado nada”, ha manifestado.

“Ayer por la tarde pudimos entrar con canoas, barcas, drones y a pie”, explica uno de los bomberos. El personal de emergencias calcula que en el aparcamiento hay decenas de coches, lejos de los cientos sobre los que se especulaba en las redes. “Recorrimos el parking entero y por suerte no hemos localizado ningún cadáver. Otra cosa es que pueda aparecer alguno según se vacía el aparcamiento, pero de momento los coches están todos vacíos”, remarca otro agente. “Decían que aquí había 600 muertos, imagínate con la congoja que entramos ayer”, prosigue. “Es verdad que nos encontramos carritos de bebés y todo era muy tétrico, pero de momento no hay nada. Rompimos las ventanas de los vehículos, tanteamos el suelo con palos y no hemos encontrado cadáveres”, explica otro mientras las bombas de agua siguen achicando.

En Aldaia, de 31.000 habitantes, están trabajando, junto a los bomberos, miembros de la Unidad Militar de Emergencia (UME), que también operan en muchas otras localidades. En total, 7.800 militares están desplegados ya en 69 municipios afectados por la dana, según ha detallado el general jefe de la UME, Javier Marcos. Como parte de ese contingente, el buque Galicia de la Armada ha llegado al puerto de Valencia con 104 infantes de Marina, camiones con comida, agua, material de apoyo y dos helicópteros.

65 de los municipios afectados por la dana suman una población de 845.371 habitantes, el 31,8% de la población de la provincia de Valencia, según datos de la Cámara de Comercio de Valencia. El catedrático de Ingeniería de la Construcción de la Universitat Politécnica de València, Víctor Yepes, ha estimado que reparar las infrasestructuras costaría una cifra de magnitud “similar al PIB de España anual”, es decir de alrededor de 1,5 billones de euros.

En el municipio de Paiporta, epicentro de la destrucción con al menos 70 muertos, se ha redoblado la presencia de las fuerzas armadas, un día después de los graves incidentes que rodearon la visita de los Reyes, Pedro Sánchez y el presidente valenciano, Carlos Mazón. Fuentes del Ayuntamiento confirman el incremento en el número de efectivos del operativo, que está volcado en descongestionar los accesos al pueblo para que la maquinaria pesada pueda entrar e ir retirando toda la basura, muebles y enseres sacada de las casas por los vecinos. “Con diferencia, desde ayer hay muchísimos más. No hay color”, afirma María Soler, de 24 años, mientras limpia el bar de su familia. A 33 kilómetros de Paiporta, en Chiva, otro de los municipios afectados por el desbordamiento de un barranco, han sido desalojadas decenas de personas tras el derrumbe parcial de un edificio. Las autoridades han ordenado a lo vecinos de varios edificios cercanos que salgan de sus viviendas mientras los técnicos comprueban si son seguros, y han habilitado 100 plazas en un instituto, el IES Marjana, para acoger a quien lo necesite.

Al menos seis carreteras de la provincia de Valencia han registrado desde primera hora de este lunes retenciones que han sumado más de 30 kilómetros en toda la región y han colapsado los accesos a la ciudad. Entre ellas la V-30 y la V-31, que tienen restringido el acceso como consecuencia de la dana. Se han registrado también atascos importantes en las autovías A-3 y A-7 (que tiene un tramo cortado por las inundaciones), y cortes que han afectado a 130 kilómetros de carreteras de la provincia. El Cecopi, el organismo público que está gestionando la crisis, acordó en la noche del domingo extender la orden que limita la circulación en el área metropolitana de Valencia afectada por las inundaciones, con el objetivo de facilitar los trabajos de emergencia y “ante el riesgo extremo de colapso” de las principales vías de acceso y salida de la ciudad.

Críticas de Mazón

En paralelo se ha reactivado la tormenta política, que no ha cesado —en ocasiones con sordina y en otras con estruendo— desde que el miércoles pasado comenzaron a apreciarse las consecuencias trágicas de la dana, que se ha cobrado ya la vida de 210 personas en la provincia de Valencia y otras cuatro en localidades de Castilla-La Mancha y Andalucía. El presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón (PP), que durante los primeros días se centró en reconocer y agradecer la colaboración entre las administraciones central y autonómica, ha cargado este lunes contra el Gobierno de Pedro Sánchez. Mazón ha asegurado que la “confederación del ministerio” —en referencia a la confederación hidrográfica del Júcar, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica— llegó a desactivar tres veces la alerta hidrológica el día que comenzó la dana, y ha justificado de esa forma que la Generalitat no enviara el aviso a la ciudadanía a través de los móviles hasta las ocho de la tarde del martes.

Durante una entrevista en la COPE, el dirigente popular ha remarcado que solicitaron ayuda al Gobierno central. “A las 15.21 del martes se activa a la UME. La propia confederación del ministerio había desactivado la alerta hidrológica, porque se desactivó a la una, a las tres y a las cuatro, [y] a pesar de eso activamos a la UME”, ha señalado. “La gran revolución meteorológica, la del peligro de desbordamiento de ríos, barrancos y cauces, que es lo que provoca la emergencia, hasta cerca de las siete no se le transmite al 112 ni a los jefes operativos. Insisto, después de tres desactivaciones previas”, ha reiterado Mazón.

El Gobierno ha replicado afirmando que “las confederaciones hidrográficas no lanzan alertas”, sino que se limitan a trasladar los datos de pluviometría y el nivel de los cauces. “El organismo competente para lanzar alertas hidrológicas son los servicios de emergencias autonómicos”, subrayan fuentes del Ejecutivo, que añaden: “Si las confederaciones hidrográficas no lanzan alertas, no puede desactivarlas”. La Aemet sí había decretado aviso rojo meteorológico por lluvias torrenciales (máximo riesgo) para toda la provincia de Valencia desde las 9.40 del martes, pero en varios municipios afectados por la dana no llegó a llover, sino que se sufrió directamente la crecida de los ríos provenientes de otras localidades. La Generalitat no envió el aviso a la ciudadanía a través de los móviles hasta las 20.00, cuando ya varios municipios estaban inundados.

La bronca política ha crecido también a lomos de los altercados registrados en Paiporta el domingo, cuando cientos de personas increparon a los Reyes, a Pedro Sánchez y a Mazón durante su visita a la localidad. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha confirmado que el presidente del Gobierno recibió “un golpe” y que su equipo decidió evacuarle por “razones obvias de seguridad”. “Había un riesgo evidente y ya había recibido un golpe. Su equipo de seguridad actuó de forma diligente”, ha dicho. Grande-Marlaska ha señalado que los actos violentos fueron protagonizados por un grupo “marginal” que las fuerzas de seguridad ya están investigando. Fuentes de la Guardia Civil han confirmado más tarde que ya han sido identificadas varias de las personas que supuestamente hostigaron a Sánchez, que no están vinculadas aparentemente a grupos ultras y que podrían ser detenidas en las próximas horas. El Juzgado de Instrucción número 3 de Torrent, en funciones de guardia, ha recibido un atestado de la Guardia Civil y ha incoado diligencias previas. Por la tarde, el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha solicitado al Ministerio de Justicia la autorización económica para nombrar a tres jueces sustitutos que refuercen los partidos judiciales de la provincia de Valencia más afectados por la dana: Torrent, Requena y Catarroja.

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha censurado esa agresión en una comparecencia sin preguntas a última hora de la mañana. “Por supuesto que las expresiones de violencia no nos representan, y las rechazamos. Se dirijan a sus majestades, al presidente [del Gobierno] o al de la Generalitat”, ha dicho, aunque añadiendo que no participará en ningún señalamiento “a ciudadanos”. Feijóo ha vuelto a reclamar que se declare la emergencia nacional, lo que implicaría quitarle el mando de la gestión a Mazón, algo que este no ha pedido. El líder del PP ha entonado, en todo caso, una suerte de mea culpa por sus críticas vertidas contra el Ejecutivo en los primeros días de la catástrofe. “Hoy no voy a caer en nuevas críticas al Gobierno”, ha manifestado. “Soy consciente de que debe haber un antes y un después de esto. Debemos cambiar. Es necesaria una política útil, colaborativa”, ha reflexionado.

Por su parte, el coportavoz de Podemos Pablo Fernández ha vuelto a arremeter contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez, al que ve “enfrascado en una lucha táctica” con el Gobierno valenciano de Mazón, y achaca a este hecho el que no se haya declarado el estado de alarma. “El Gobierno de Sánchez tenía la capacidad de intervenir desde el primer día y no lo ha hecho. No había que esperar a que el negligente, el inútil de Mazón pidiera absolutamente nada. Había que tomar el mando y actuar con urgencia”, ha afeado Fernández. El dirigente de Podemos ha afirmado también que el presidente popular debe dimitir y “rendir cuentas ante los tribunales de justicia por esta calamitosa gestión”, y ha insistido en que “es evidente” que la coordinación entre el Gobierno y la Generalitat “no está siendo suficiente”.

Alerta en Cataluña

La dana aún no ha desaparecido, y, al tiempo que la Comunidad Valenciana trata de reponerse de la catástrofe, otras zonas registran lluvias torrenciales. La Aemet ha emitido este lunes un nuevo aviso rojo (máximo riesgo), el noveno en siete días, en este caso para Cataluña y, en concreto, para el litoral de Barcelona, aunque lo ha levantado a las 14.00. Tarragona sigue bajo aviso naranja, el segundo de una escala de tres, mientras que es amarillo, el mínimo en la escala de alertas, en otras zonas de Cataluña, Comunidad Valenciana, Aragón y Extremadura.

Pasadas las 10.30, el Gobierno catalán ha enviado una “alerta presidencial” a través de móvil para avisar de lluvias “continuadas y torrenciales” en las comarcas del Barcelonès y Garraf. La alerta (en catalán, castellano e inglés) llamaba a evitar desplazamientos y alejarse de rieras y barrancos “que, aunque no llueva, pueden bajar con intensidad”. El servicio de de trenes de la red de Rodalies de Cataluña se ha comenzado a restrablecer desde las 17.00 en todo el territorio tras más de seis horas suspendido como consecuencia de las fuertes lluvias. La acumulación de agua en un túnel de la línea de alta velocidad entre Barcelona y Madrid ha obligado a cortar el servicio entre la capital catalana y Tarragona. En el aeropuerto de El Prat los trabajadores han grabado vídeos en los que se ven chorros de agua cayendo en el interior de la terminal T1 y Aena ha desviado 15 vuelos y cancelado o retrasado otro medio centenar. Las universidades catalanas han suspendido las clases.

La Aemet sí ha dado por finalizada la crisis meteorológica en la Comunidad Valenciana. El jefe de Climatología de la agencia en la región, José Ángel Núñez, ha señalado a EL PAÍS: “Va a seguir el tiempo variable, con alguna lluvia, pero ya nada adverso”. “Ahora queda la crisis humanitaria”, ha indicado.

Con información de Virginia Martínez, Belén Domínguez Cebrián, Paula Chouza, Elsa García de Blas, Victoria Torres, Clara Blanchar, Marc Rovira, Carlos Garfella, Reyes Rincón, Fernando Peinado, Óscar López-Fonseca y Javier F. Magariño.