La apuesta de Sánchez por Puente, Besteiro y Jalloul impulsa su proyección en el PSOE
La entrada de los tres dirigentes en el equipo de negociadores socialistas para la investidura les sitúa en una posición preferente para futuros movimientos en el partido
María Jesús Montero, Santos Cerdán y Félix Bolaños asumieron la misión tras el 23-J de sentar los cimientos y engrasar la relación con los socios necesarios para la investidura de Pedro Sánchez. La decisión del presidente en funciones y secretario general del PSOE, una vez producido el encargo de Felipe VI de ir a la investidura, de ampliar el equipo de negociadores con la entrada de Óscar Puente, José Ramón Gómez Besteiro y Hana Jalloul, además de la portavoz de la dirección federal, Pilar Alegría, conlleva un mensaje entre líneas: la proyección de otros perfiles de su confianza que, salvo en momentos puntuales, no habían tenido una dimensión política nacional. Su inclusión en la comisión negociadora con los grupos parlamentarios les sitúa en una posición preferente para futuros movimientos a corto y medio plazo, según concluyen diversos cuadros consultados en los distintos niveles del PSOE, desde la cúpula a secretarios provinciales. Y sin descartar a alguno de ellos en la composición de un nuevo Gobierno, cuya remodelación ven muy probable en los círculos socialistas si prosperara la investidura.
Puente ha recobrado su condición como uno de los grandes activos del PSOE tras su papel en la investidura fallida de Alberto Núñez Feijóo, en la que intervino en lugar de Sánchez. “Le desarboló con una actuación contundente, dura, pero siempre basada en hechos y sin ningún descalificativo”, valoran en Ferraz la intervención de Puente, que descolocó al candidato del PP. Portavoz de la ejecutiva socialista tras la victoria de Sánchez en las primarias de 2017, en las que fue uno de los contados apoyos con los que el líder del PSOE sumó desde el minuto uno, Puente desempeñó esa función durante unos meses hasta que optó por centrarse de lleno en la gestión del Ayuntamiento de Valladolid (2015-2023). Su victoria pírrica el 28-M, en la que fue la lista más votada con un resultado insuficiente frente a la mayoría absoluta de PP y Vox, se terminó convirtiendo en un argumento que Feijóo no supo contrarrestar. Puente ya dejó claro en una entrevista en EL PAÍS que no aspira a sustituir a Patxi López, el actual portavoz socialista en el Congreso. El diputado vasco no forma parte de la comisión negociadora, una ausencia a la que en Ferraz restan importancia: “Tendrá su espacio, como es lógico”. Lo que ha quedado claro por el momento es que Puente ha reforzado con su estilo el abanico de los portavoces del PSOE con más predicamento. Con un plus: un perfil de choque con el PP que blindó a Sánchez en la investidura. La reacción de los populares, cuyo vicesecretario de Organización, Miguel Tellado, le ha llegado a acusar de “matón de colegio” tras el altercado que Puente sufrió en un tren, ha reforzado aún más a Puente. “Tellado no solo no rectifica, sino que se reafirma en justificar la violencia y la intimidación. Esta es la peor política. Señor Feijóo, céselo sin más dilación, o diga que comparte sus palabras. No tiene más opción”, ha instado el secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, al presidente del PP.
Gómez Besteiro es otro valor que Sánchez ha recuperado para la causa. En cierto modo ya lo hizo en la campaña de las elecciones generales, en la que protagonizó un mitin en Lugo con el exdelegado del Gobierno en Galicia y debutante ―al igual que Óscar Puente― en el Congreso. Gómez Besteiro dimitió en marzo de 2016 como secretario general del PSdeG porque tenía diez imputaciones judiciales. En 2021 quedó libre de todas las investigaciones mientras se planteaba exigir responsabilidades a la justicia. La Audiencia Provincial de Lugo le desimputó en febrero de ese año y archivó el caso Garañón sobre las presuntas irregularidades en un desarrollo urbanístico. El tribunal provincial reprochó a la juez Pilar de Lara que la investigación se fundamentara en “meras sospechas que no alcanzan el carácter de indicios”. El diputado lucense, que suena como el probable candidato en las elecciones gallegas del próximo año, se estrenó en el Congreso con una intervención en gallego muy simbólica, ya que abrió el debate que terminó aprobando el uso de las lenguas cooficiales en el Congreso. Sánchez le reserva un rol en la comisión negociadora ante partidos como el BNG, aunque no se descarta que también lo tenga con los demás partidos nacionalistas e independentistas. Alegría explicó este miércoles sobre los componentes de la comisión negociadora que “acudirán unos u otros dependiendo del grupo parlamentario y los temas a tratar”.
Y es aquí donde Hana Jalloul puede jugar un papel diferente con unas cualidades muy específicas. La secretaria de Política Internacional y Cooperación al Desarrollo del PSOE fue secretaria de Estado de Migraciones entre 2020 y 2021, antes de su salto a la política como número dos de Ángel Gabilondo en las elecciones del 4-M en la Comunidad de Madrid. Su conocimiento del ámbito migratorio le posicionaría como interlocutoria de Coalición Canaria: la formación de Fernando Clavijo gobierna el archipiélago, que sufre estas semanas un repunte de las llegadas de inmigrantes irregulares. El PSOE pretende el voto positivo, o al menos la abstención, de Coalición Canaria, que votó a favor de la investidura de Feijóo, pero se ha abierto a hacerlo en la de Sánchez si se cumplen sus demandas en inversiones pendientes y la gestión de los aeropuertos de las islas. Jalloul, además, cuenta con el beneplácito de Sánchez por su labor en las negociaciones tras las que fue nombrado el pasado noviembre presidente de la Internacional Socialista.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.