La testigo 78 levanta una férrea defensa en favor de Camps: “No tenía una relación de amistad con El Bigotes”

El testimonio de Nuria Romeral, ex jefa de prensa y ex secretaria autonómica de Comunicación de Francisco Camps, se levantó este jueves como un férreo muro de defensa del expresidente de la Generalitat Valenciana. Quien fuera durante años su sombra y su protectora ante los periodistas, ha respaldado de nuevo la versión del exdirigente del PP en el juicio que se celebra contra él en la Audiencia Nacional por su presunta implicación en el caso Gürtel. Según Romeral, que ha declarado como testigo (la número 78), Camps “nunca” ayudó a la trama de Francisco Correa a aterrizar en la comunidad; nunca fue amigo de Álvaro Pérez, El Bigotes, hombre de la red corrupta en la región; y “jamás” dio instrucciones a Salvadora Ibars, directora de Promoción Institucional, para que adjudicasen trabajos de la feria de turismo Fitur 2009 a las compañías de Correa.

—¿Recuerda a Pérez en alguna reunión en Presidencia, o departiendo en el coche [de Camps] o en algún acto? —le ha insistido el abogado del ex jefe del Gobierno autonómico.

—No. Lo más cerca que lo he visto del Palau [de la Generalitat] es cuando me tomé un café con él en la Plaza de la Virgen. Y yo estaba el 80% del tiempo con Camps —ha respondido la testigo.

La Fiscalía Anticorrupción pide dos años y medio de cárcel para Camps por maniobrar supuestamente para favorecer a compañías de la red corrupta, como Orange Market. La acusación expone que “dio verbalmente instrucciones” a Ibars para que adjudicasen a esta empresa los trabajos relativos al montaje del stand de Grandes Proyectos de Fitur 2009.

Romeral, que ha “jurado” decir la verdad al comienzo de su intervención, ya rebajó el poder de Camps en el juicio sobre la financiación irregular del PP valenciano, donde el expresidente no se encontraba acusado. En esa vista oral, la ex jefa de prensa descargó la responsabilidad en Ricardo Costa, secretario general de la formación regional: “Todo pasaba por él”, aseveró. En esa ocasión, el juez le llegó a preguntar “quién mandaba y controlaba el partido”, a lo que contestó: “Ricardo Costa, sin ninguna duda”.

Perteneciente al núcleo más duro de Camps, tras la dimisión en 2011 del presidente, Romeral fue nombrada directora de la radio pública valenciana. Hasta entonces pasaba muchas horas con el jefe del Gobierno autonómico, con el que despachaba a diario. Según ha admitido, conocía a las empresas del grupo de Correa desde finales de los años 90 porque organizaban actos del partido, y también a El Bigotes. “Álvaro Pérez era un hombre peculiar. Por su bigote, es un hombre que lo ves y no lo olvidas [...] La imagen de Pérez era inolvidable”. Pero ha insistido en separar esas funciones de las adjudicaciones de la Generalitat. Según ella, Camps no ayudó a la trama a desembarcar en Valencia, como mantiene la Fiscalía Anticorrupción y han explicado los integrantes de la red corrupta. “Estoy convencida de que no. Porque no es la forma de proceder de Camps”, ha asegurado la ex secretaria de Comunicación.

Es más, ha apostillado Romeral, el exdirigente del PP y El Bigotes nunca fueron amigos. “Relación de amistad, no tenían. Cuando coincidían, hablaban. Pero era muy puntual”, ha minimizado, enmarcando esos encuentros únicamente como parte de los eventos del partido que organizaba Álvaro Pérez: “Era frecuente que coincidieran en actos del partido, como coincidía con mucha gente”. Durante su declaración ante el tribunal, El Bigotes mantuvo una versión muy distinta: “Yo era consciente de que [Camps] me apreciaba y quería. Yo era su amigo”; “me parecería obsceno negar lo evidente”; “yo le llamaba a menudo”; “yo solo tenía una persona de referencia que me ayudaba: la misma persona con la que yo hablé para irme a Valencia, [en referencia al exdirigente del PP autonómico]”. En una llamada interceptada por la Policía, Camps se refiere a Pérez como “amiguito del alma”.

Romeral ha afirmado que, incluso, Camps le recomendó marcar distancias con Álvaro Pérez y que la Secretaría de Comunicación no contratara con sus compañías. “Al principio de los tiempos, me dijo que la empresa que trabaja para el partido no tiene que trabajar para la Generalitat. En política, es una norma bastante clara. Seguro que, si usted se toma la molestia de ver quién ha hecho ahora la campaña del PSOE o de Compromís, verá que probablemente no han trabajado cuando [ambas fuerzas] han estado en el Gobierno. Para quienes estamos en este mundo, esta es una norma no escrita que se intenta cumplir”. Pese a estas palabras, Gürtel consiguió beneficiosas adjudicaciones de otros departamentos de la Administración regional.

El testimonio clave de Ricardo Costa

Este jueves, tras la declaración de Nuria Romeral, el tribunal ha escuchado el testimonio de Angélica Such, quien fuera consejera de Turismo de Camps entre 2007 y 2009. En línea con la antigua jefa de prensa del presidente, esta exdiputada del PP ha dicho que nunca recibió “ninguna indicación” del líder de los populares valencianos para contratar con las empresas de la trama.

La vista oral continuará el próximo martes con una sesión que se prevé crucial. Ese día, el tribunal ha planificado el interrogatorio a Ricardo Costa, quien fuera secretario general del PP valenciano y cuya declaración resultó clave para sentar a Francisco Camps en el banquillo. El ex número dos del partido conservador aseguró que el presidente estaba al tanto de la trama, y que se operaba bajo sus órdenes. Milagrosa Martínez, exconsejera de Turismo y condenada a nueve años de cárcel en otra línea de investigación de Gürtel, también está citada a declarar esa jornada.