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Leonor Watling: “Me encanta Ciudad de México, sus olores y sabores”

La actriz y cantante madrileña prefiere viajar con calma y sin agenda. Barcelona, Buenos Aires y el cañón del Duratón están entre sus destinos fetiche

La cantante y actriz Leonor Watling.
La cantante y actriz Leonor Watling.Lisbeth Salas

Cuatro años después de lanzar El porvenir, Leonor Watling prepara nuevo álbum con Marlango. Se publicará tras el verano y, como adelanto, Poco a poco ya suena en las plataformas digitales.

¿De dónde acaba de volver?

De cantar con Marlango en Sagunto. Y por placer del interior de Mallorca. He estado en la sierra de la Tramontana, al norte de la isla.

¿En qué lugar del mundo se ha sentido más feliz?

En Ciudad de Mexico. He estado muchas veces y, ya desde la primera, siempre me pongo de buen humor nada más llegar. Me encanta su exceso de olores, de sabores... Las sensaciones, aún sin mezcal, son alucinantes. 

Mencione el lugar que más merece la fama que posee.

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Barcelona, sin duda.

¿Y el que menos?

Palermo, en Sicilia, me decepcionó un poco. Pero eso siempre depende del momento en que te pille el viaje.

Vistas al cañón del río Duratón, en Sepúlveda, desde la ermita de San Frutos.
Vistas al cañón del río Duratón, en Sepúlveda, desde la ermita de San Frutos.Carlos Ciudad (getty images)

Describa su vista favorita.

El cañón del río Duratón, en Sepúlveda, cerca de Segovia. Allí todo está en un mismo tono: el río, los arboles...

Háblenos de algún rinconcito estupendo que conozca.

Buenos Aires es el paraíso de los rinconcitos.

¿Algún placer inconfesable cuando va de viaje?

Inconfesable de verdad, no tengo ninguno. Lo más cercano a eso es mi gusto por visitar papelerías en cada ciudad que piso.

Una de las calles de Hondarribia, en Guipuzkoa.
Una de las calles de Hondarribia, en Guipuzkoa.Iñigo Fernández de Pinedo (getty images)

Describa un recuerdo de las vacaciones de su niñez.

Las vacaciones en el País Vasco francés, y también en Hondarribia, cerca de Donosti. No eran las más habituales, por eso las recuerdo con tanto cariño. Las que pasábamos en Sepúlveda, en cambio, eran más largas y frecuentes.

¿Cuál fue el souvenir más lamentable que compró en un viaje?

Compro bastantes cosas absurdas. Seguramente lo más ridículo sea un cenicero de metacrilato con caracolas que encontré en algún lugar costero.

Describa un desastre vacacional.

En general tengo suerte y viajo con actitud sen, de ahí que incluso en momentos difíciles me ría mucho.

¿Cuál fue el personaje más extraño que ha conocido en sus viajes?

Un poeta rapero neoyorquino llamado Joe. Era un hombre muy mayor que siempre estaba en el bar del Soho donde yo tomaba cerveza o café, según el momento del día. Se notaba que era un personaje del barrio.

¿Turista activa o tumbada al sol?

Yo soy más bien relajada. Viajar con agenda me angustia mucho, y más aún si viajo con niños. En los museos veo un par de cuadros detenidamente y lo demás, un poco por encima.

¿Mochilera o en plan lujo?

La mezcla es lo que más me gusta: es el estado ideal. Ni todo el tiempo mochilera y montada en caravana ni siempre a todo lujo. Es bonito cenar en el restaurante de un camping algo que te mueres de rico, y también de vez en cuando ir a un hotelazo con piscina, si puedes.

¿Hay algún transporte que deteste especialmente?

No soy muy aficionada al barco. Ni a los veleros ni a ningún otro tipo. Es una pena porque sé que me pierdo algunas experiencias.

Confiese qué se llevó de la habitación de un hotel.

Si hay botecitos de cremas buenas o lápices, sí que me los llevo.

¿Qué frase en otro idioma emplea con más frecuencia?

Yo pido perdón todo el tiempo, así que "sorry".

¿Qué es lo que más le gustaría encontrar dentro de su minibar?

Con que haya cervezas me conformo. 

Describa un plato memorable que probó durante un viaje.

Fue en Mallorca, en el restaurante Brut que está en Llubí. Toda la cena fue alucinante y allí comí ancas de rana por primera vez.

Y alguno incomprensible...

En Japón, la mitad de las cosas no sabes qué son. Claro que comen maki y sushi, pero también millones de cosas más que no conocemos.

¿Ha sido víctima de algún timo por ser viajera inexperta?

Normalmente no, porque viajo muy arropada. Aunque tampoco soy una gran aventurera, Salgo a la calle cuando siento que sé dónde estoy.

Mencione algo que nunca falta en su maleta...

Siempre meto un cuaderno en el que anotar y dibujar impresiones.

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