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‘Cut the Wire’, la bomba de juguete que ha ofendido a Canadá

Varios padres han expresado que banaliza la violencia entre los niños, como también lo señalaron voces críticas en EE UU. La empresa suspende su fabricación tras las quejas

Por 25 dólares canadienses (unos 16,5 euros), Walmart Canadá vende –on line y en algunas sucursales- un juguete que ha provocado críticas. De hecho, la empresa anunció el pasado 11 de enero que agotará los que aún tiene en existencias y que no hará nuevos pedidos a Yulu, la firma hongkonesa que los fabrica. El juguete se llama Cut the Wire (Corta el cable, por su traducción al español) y es una réplica en plástico de una bomba.

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Los jugadores –de seis años en adelante, de acuerdo con lo que recomienda Yulu, el fabricante– deben desactivar el falso artefacto explosivo antes de que el tiempo se agote. Si no lo consiguen, el aditamento emite vibraciones y simula el ruido de un estallido. “El objetivo del juego es saber cuál es el cable correcto que hay que cortar. ¡Mantén la calma, sigue las pistas y desactiva la bomba antes de que explote!”, aparece en la descripción del juguete en la página web del fabricante.

Sin embargo, a algunos canadienses Cut the Wire les ha parecido insultante, según comentarios expresados en medios de comunicación y redes sociales. “Es algo horrendo, especialmente en los tiempos actuales. Con ello se da una banalización entre los niños de una cosa que es peligrosa”, manifestó a la cadena CBC Sharon Butler, una madre que vio el juguete en una sucursal ubicada en London (Ontario). Por su parte, usuarios en Twitter y en la página web de Walmart Canadá expresaron que desactivar una bomba no puede ser un pasatiempo a tan temprana edad y que los artefactos empleados por terroristas son todo menos divertidos.

Otras voces han considerado las quejas exageradas. “Si te ofende el juego, simplemente deberías comprar otro y dejar que la gente se divierta”, escribió un ciudadano en la página donde figura la descripción del juguete. Tras las críticas, Walmart Canadá anunció el 11 de enero en un comunicado su decisión de no hacer nuevos pedidos al fabricante y, de igual modo, subrayó que en ningún momento quiso ofender a los clientes con la venta del mecanismo. Asimismo, el portal canadiense de Amazon borró hace unos días el producto de su numerosa oferta.

Cabe destacar que el juguete, de colores llamativos, ya había tenido problemas al sur de la frontera. La cadena Target lo vendía en exclusiva en sus tiendas de Estados Unidos. No obstante, comenzó a retirarlo de los anaqueles a mediados de octubre tras las críticas por parte de varios padres de familia. Las razones de las quejas eran idénticas a las canadienses. Frente al revuelo en Norteamérica, Jochem van Rijn, presidente de Yulu, informó la semana pasada a The New York Times que la firma dejó de fabricar el juguete.

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