La nueva piedra que es más resistente que el mármol y ha conquistado a los interioristas

Esta casa de 180 metros cuadrados ubicada en la plaza Flagey de Bruselas era un batiburrillo caótico hasta que sus dueños decidieron sustituir la claustrofobia por un espacio limpio y luminoso. Así que recurrieron al diseñador Michel Penneman y a las virtudes de Neolith para recubrir suelos, techos, paredes…

La piedra sinterizada de Neolith es el material que está cambiando el mundo de las superficies decorativas, y se ha hecho imprescindible en la arquitectura de vanguardia. Como en la reforma de este piso, en el que Penneman se enfrentó al reto de los espacios pequeños, que según dice prefiere a las casas grandes: "Hace falta buscar una solución creativa para encontrar el equilibrio entre espacio, estética y presupuesto. Esa complejidad me encanta". El resultado es una vivienda donde el minimalismo gana la batalla y lo superfluo salta por la ventana.

Por qué todos quieren Neolith

¿Casualidad? ¿El azar? Puede ser, pero el caso es que los hermanos Esteve tenían ya experiencia trabajando con mármoles y piedras naturales cuando en 2009 fundaron su propia empresa, TheSize, con un objetivo muy claro: jugárselo todo al Neolith.

Piedra sinterizada, así se llama técnicamente, y da lugar a un tipo de superficie con unas características técnicas inéditas en el momento en que los Esteve se volcaron con este material: es muy fino (hasta tres milímetros), tiene una porosidad bajísima, es duro hasta decir basta y de altísima densidad.

Pero, ¿qué es eso de la sinterización? Pues tan sencillo (es un decir) como calentar las materias primas (cuarzo, óxidos, sílice, vidrios, feldespato…) en imponentes hornos hasta alcanzar la temperatura suficiente para que la estructura interna de Neolith se reorganice y logre una compactación casi del 100%. ¿A que parece fácil? Pues no lo intente en casa. Mejor que se lo instale un especialista.