El invierno de los ricos: un paseo por Gstaad, donde el lujo aún es lo que era
Es una de las estaciones de esquí más famosas y exclusivas del mundo y las celebridades y los poderosos acuden allí en busca de discreción y un tipo de lujo que todavía no ha salido en el 'reality' de las Kardashian
Es lujosa, pero nunca ha caído en la ostentación. Está llena de celebridades y poderosos, pero nunca ha sido pasto de los flashes de los paparazis. Gstaad, el pueblo suizo ubicado en el cantón de Berna, forma parte de la realeza de los destinos vacacionales, uno de esos cuya sola mención hace pensar en elegancia, dinero, complementos muy caros y personajes relevantes rodeando una chimenea. En resumen, un bastión del lujo de otro siglo, un momento congelado –disculpen la obviedad del chiste– antes de Internet, los reality shows y el nuevo organigrama de poderes del siglo XXI.
Si usted quiere descubrir los milagros de esta región en una escapada este invierno que casi acaba de comenzar (y dispone de presupuesto), puede comenzar explorando el hotel Park Gstaad: un establecimiento inaugurado en 1910, el mismo año en que el ferrocarril llegó a esta localidad y permitió que los turistas empezasen a explorar la zona. Aquí se han alojado el Aga Khan, Peter Ustinov o Grace Kelly, atraídos por una decoración que mezcla la autenticidad de un chalé suizo con la estructura contemporánea y dinámica de un hotel de cinco estrellas. El interior es obra de la decoradora Federica Palacios, y logra lo imposible: decoración alpina 'minimal' (piensa en paredes forradas de madera de pino con un televisor Bang & Olufsen frente a la cama).
La localización es mucho menos minimalista. Las habitaciones del Park Gstaad tienen mareantes vistas al bosque, a las montañas (pico Wispeele incluido) e incluso al glaciar Diablerets. Si logra salir de la cama, ¿qué hacer? Vivir la gran vida. Lanzarse a la calle Hauptrasse, donde se amontonan las tiendas del lujo como Hermès, Prada o Moncler. Esquiar, por supuesto, que es lo que ha venido a hacer usted realmente aquí. Comer buen queso en restaurantes de lujo y, si tiene suerte, cruzarse con las estrellas, políticos y royals que caminan tranquilamente por las calles. Lamentamos que es demasiado tarde para ver ya a glorias como Michael Jackson, Lady Di o Marlene Dietrich, habituales en décadas pasadas. La presencia constante de famosos estaba tan asimilada que ha dejado chistes privados como este, nuestro favorito: “A Elizabeth Taylor le gustaba tanto Gstaad que se trajo aquí a todos sus maridos”.
El Park Gstaad es solo una de las opciones que ofrece Booking.com, la empresa de reservas de alojamiento presente en 70 países que ofrece más de 29 millones de posibilidades de alojamiento, incluidas más de 5,7 millones de opciones en casas, apartamentos y otros lugares únicos donde alojarse. Esto, por si a pesar de todo a usted no le gusta esquiar.
