Mientras algunos hacen las repeticiones justas o necesarias en cada serie de levantamiento de peso (normalmente, 10, 12 o 15 repeticiones), otros van al fallo muscular. Esto significa repetir tantas veces como sea posible hasta que el músculo ya no es capaz de moverse.
"Cualquier movimiento que se realiza en el gimnasio busca una adaptación, una mejora en el músculo. Pero una vez que se ha llegado al tope (ese momento en que se levanta el peso con buena cadencia y con un esfuerzo moderado), ya no hay mejora, solo una lenta agonía hasta que el músculo no da para más (esas repeticiones cansinas y torpes). Así que lo mismo han estado un minuto más levantando peso sin que sirva de nada", apunta Muñoz. En otras palabras, si a partir de la séptima repetición con la mancuerna ves que te cuesta alma y vida seguir levantándola, para y descansa. Y si la mancuerna pesa demasiado, prueba con menos peso.
Machacarse no solo es malo cuando estamos haciendo pesas. Pasarse, en cualquier ejercicio, puede llevar a la lesión: "El spinning no es malo, pero pedalear una hora de pie, en función de la distancia al manillar y la postura del cuerpo, altera el centro de gravedad y puede sobrecargar la rodilla", apunta Muñoz.