Sesión de videoarte reivindicativo

El videoarte es una técnica artística ligada históricamente al activismo. "Al igual que la performance, suele generar un gran impacto. Por eso, desde sus inicios, movimientos como el feminista y el LGTB+ han recurrido a este tipo de medios para transmitir sus mensajes de una manera más directa y sencilla", explica Laura Hernández, una de las cuatro comisarias de la muestra Videopride, que se celebra esta tarde (19.00 horas; entrada gratuita) en el Museo La Neomudéjar de Madrid (calle Antonio Nebrija, s/n). "Con el tiempo ha ido cobrando más importancia y especialmente ahora, porque vivimos en una sociedad acostumbrada al lenguaje audiovisual, es una herramienta de reivindicación fundamental".

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Videopride es la única muestra de videoarte LGTB+ de España. En su quinta edición, ha seleccionado el trabajo de 18 artistas internacionales. "Aunque nació como algo pequeño, su repercusión ha ido creciendo y este año nos han llegado más de 500 obras audiovisuales de todas partes del mundo", cuenta Hernández. Cada pieza dura entre tres y ocho minutos. "El espectador podrá ver durante algo más de una hora una recopilación de los trabajos más impactantes que hemos recibido", explica la comisaria, y añade: "Solo se podrá ver hoy, lo que la convierte en una especie de festival de cortometrajes".

Hernández comisaria esta muestra junto a Amanda Rodríguez, Izpia Batre y Emma Solana. Las cuatro pertenecen al área de voluntariado de Arcópoli –Asociación LGTB de la Comunidad de Madrid y de las Universidades Complutense y Politécnica– donde gestionan proyectos culturales. "Para nosotras, es muy importante que la celebración del Orgullo esté relacionada con la cultura, que tenga un discurso y que la gente pueda acceder a él de diferentes maneras".

Por otro lado, mañana viernes se estrena el cortometraje documental Las hijas de la vergüenza (19.00 horas; entrada gratuita) en el Ateneo de Madrid (calle del Prado, 21), una cinta que denuncia la situación de las personas travestis dentro del movimiento LGTB+ en España. "Reciben constantes agresiones, tanto verbales como físicas, pero muchas no denuncian", explica su productor y codirector, Carlos Valdivia, quien también pertenece al Observatorio Madrileño contra la LGTBifobia. "No hay cifras específicas de agresiones contra personas travestis porque se clasifican por orientación sexual y/o identidad de género", aclara. En 2017, el número total de agresiones contra el colectivo LGTB+ registradas por el Observatorio fue de 321, 81 más que en 2016.

A través de entrevistas, las travestis Diossa, Kika Lorace, Supremme Deluxe, Nacha la Macha, La Pulpa, Libertad Montero y Tavi Gallart cuentan su experiencia en este documental que también denuncia la travestifobia dentro del propio colectivo. "Muchas de ellas trabajan bailando y actuando en discotecas gays donde también reciben insultos y otro tipo de agresiones", cuenta Valdivia y añade que "ante todo, este proyecto habla de travestis y no de transexuales". "Hacemos hincapié en la nomenclatura para aclarar que travesti o transformista es una persona que se viste con la ropa asociada al género contrario. Sin embargo, una persona transexual es aquella que no se siente identificada con el género que le fue asignado al nacer". Las hijas de la vergüenza realiza también un repaso histórico al movimiento travesti, que lideró las primeras manifestaciones del Orgullo en Madrid hace 40 años.