Benidorm inspira a los ‘instagramers’
El fotógrafo Roberto Alcazar ha convertido su cuenta de Instagram en una celebración de las líneas, los ángulos y las perspectivas cotidianas
Imagine que David Hockney reserva en Airbnb un apartamento en Benidorm entre la playa de Poniente y un polígono industrial. El paisaje le inspira, inmortaliza la campiña alicantina y comparte sus obras en Instagram. El artista de Yorkshire no es autor de la cuenta @benidorm_dreams, pero la representa. “Es un referente, claro”. El entrecomillado es de Roberto Alcazar, el fotógrafo que sí tiene la contraseña de esa galería de Instagram.
Una colección de imágenes que transita entre el minimalismo arquitectónico, el art déco de Miami Beach, el brutalismo preconstitucional y la belleza apacible. “Me encantan las fotografias de Lewis Baltz o Martin Parr”, dice Roberto, quien empezó a revelar fotografías a los nueve años. La imagen de una chimenea en casa de sus padres se convirtió en su propia salida de humos: “Entonces supe que quería fotografiar edificios”.
Para Alcazar, su plan consiste en no tenerlo. Madruga, pasea por naves industriales, escucha música "entre el eclecticismo y la falta de criterio" y dispara. Entre sus lugares fetiches, los aparcamientos de los gimnasios. Y, aunque Benidorm es fuente de inspiración permanente, ahora vive en Sabadell, y el Vallès Occidental se ha convertido en su musa. También hace fotografías en Villajoyosa (Alicante) o en Famara (Lanzarote).
"No creo en la inspiración, creo en la rutina. Suelo madrugar e irme a hacer fotos a algún polígono industrial. Hay días en los que no rescato nada, pero siempre termino disfrutando", afirma el fotógrafo.
Templo de lo ordinario
En este perfil de Instagram se habla mucho de costumbrismo arquitectónico y social, y tomar como nombre a este pequeño pueblo de pescadores con arquitectura pretenciosa es el particular homenaje del fotógrafo. Adora lo cotidiano. Por eso Benidorm es su templo, aunque el espíritu es el mismo si comparte fotografías en Siria o Noruega.
"El lema de mi bio es Ordinary places, ordinary things, ordinary pics. Mi cuenta es una especie de patria chica compuesta por polígonos industriales, mar, cielo, ironía y un puntito de nostalgia", añade. Si alguien se pregunta cómo pintaría David Hockney, ya sabe cómo lo fotografiará Roberto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.