Todo empezó en 2010, con el cierre temporal de la autopista alemana que conecta Duisburg y Dortmund, la cual fue cerrada como parte de un proyecto cultural. En tan solo 24 horas, cerca de tres millones de personas escogieron pedalear por la vía, lo cual fue una respuesta inesperada para las autoridades.
Este hecho planteó la posibilidad de abrir una calle sin coches como solución para conectar el territorio y la ciudadanía.
Y de aquí nació la idea de construir la Radschnellweg Ruhr 1, una autopista exclusiva para bicicletas que recubrirá casi la totalidad del valle del Rühr, una conurbación urbana de más de cinco millones de habitantes y de altísima actividad económica.
Esta nueva ‘autobahn’ de 100 kilómetros de longitud trazada en los bordes de diez ciudades -entre ellas Duisburg, Bochum y Hamn-, será la encargada de tejer el territorio a través de la bicicleta. La idea del proyecto es asegurar la interconectividad en una franja de terreno delimitada, con traslados de veinte minutos entre ciudad y ciudad. Además de conectar municipios, esta vía también unirá cuatro campus universitarios sin la necesidad de semáforos, aglomeraciones de coches ni peatones con el fin de priorizar la movilidad ciclista.
This bikes-only highway will eventually be more than 60 miles long: https://t.co/aMx0r90obT pic.twitter.com/j3LWctmWEh
— Bicycling Magazine (@BicyclingMag) October 15, 2016
Con la construcción de esta autopista se pretende desplazar 50 mil coches de las calles, lo cual significa la reducción de 16 mil toneladas en emisiones de dióxido de carbono, según afirma la Regional Association Ruhr.
Martin Tönnes, uno de los planificadores urbanos encargados del proyecto, aseguró que más de 1.6 millones de personas viven en las cercanías del trazado planeado –siendo 150 mil estudiantes y 430 mil trabajadores- por lo que se espera que alrededor de 2 millones de ciclistas utilicen la vía a diario, según un estudio de la agencia RVR.
En diciembre de 2016 ya se abrió el primer tramo, de tan solo 5 kilómetros, concretamente entre Mülheim an der Ruhr y Essen. El costo de su construcción se ha compartido entre la Unión Europea, la agencia de desarrollo local RVR y el gobierno alemán.
Otros países europeos ya cuentan con proyectos similares, como es el caso de Holanda; hace una década se construyó una red vial solo para bicis y a día de hoy se sigue expandiendo e innovando, como es el caso de la ciclovía hecha con placas solares.
Noruega también está trabajando en un proyecto similar al alemán, con la construcción de una autopista para bicicletas que unirá nueve de sus ciudades principales, invirtiendo cerca de 855 millones de euros para su construcción. Su objetivo, es el de reducir a la mitad las emisiones provocadas por vehículos, y a la vez, estimular el uso de la bicicleta ya que es un país donde pedalear es menos frecuente que en lugares vecinos como Suecia o Dinamarca.
A #bicycle ferry is planned between Dragør in #Denmark and Limhamn in #Sweden 🚲⛴😀#cities | #intermodal pic.twitter.com/RcMMEb8tuI
— Anders Adamsen (@anderspreben) February 28, 2017
De hecho, en Copenhague se llegó a plantear la construcción de una autopista para bicicletas en uno de los puentes más largos de Europa, el Puente de Öresund, con más de 7.800 metros de extensión conectando Copenhague (Dinamarca) y Malmö (Suecia). Pero según una reciente publicación, este verano empezará un servicio de ferry para bicicletas que conectará estas dos capitales.
Sin embargo, como todo proyecto de gran envergadura, la construcción de Radschnellweg Ruhr 1 no queda exento de críticas. El presupuesto total de la vía Rühr costaría alrededor de los 180 millones de euros, hecho que ha causado algunas trabas y demoras debido a su alto costo. Además, este proyecto necesita apoyo tanto del estado como de los municipios que comprende la vía, ya que muchos de los gobiernos locales tendrían que asumir los gastos y servicios de mantenimiento, iluminación y limpieza. Desde Berlín, el gobierno quiere que las agencias publicitarias –instaladas a lo largo de la ruta- se hagan responsables de los costos.
A la vez, muchos ciudadanos creen que esta autopista es una campaña más de marketing por parte de las autoridades, ya que muchos tramos de esta vía ya existen y son utilizados por ciclistas diariamente; entonces, no estaríamos hablando de algo novedoso, sino de un proyecto de ampliación de vías.
De todos modos, el proyecto contempla la creación de una vía adicional para peatones, que se proyectará paralela a la autopista de bicicletas priorizando la seguridad y la prevención de accidentes entre ciclistas y viandantes.
Está claro que las bicicletas juegan un papel importantísimo en la construcción de la ciudad del futuro; además de suponer una revolución en el sector de los transportes, la bicicleta es una medida claramente eficaz para luchar contra la contaminación y el calentamiento global.
Toda la ruta Ruhr 1 puede visualizarse a través de esta galería de Flickr.
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