Si no le gustan los lunes, peor son los miércoles
El tercer día de la semana tenemos más tareas acumuladas. Y otras razones para amar la jornada de hoy
El lunes es la oveja negra de la semana. Y parece que lo tiene todo en contra. No solo es el blanco de nuestras quejas y críticas, porque venimos del relax del fin de semana y eso de volver a la actividad no nos motiva. Además, es el día de la semana con más infartos por estrés según The British Medical Journal y, por si fuera poco, en lunes cae el día más deprimente del año (blue monday: el tercer lunes de enero).
“Odiamos los lunes con cierta base real, pero no todo el mundo los odia, ni lo hace con la misma intensidad”, explica José Antonio López Rodríguez, vicepresidente de la Asociación Española de Psiquiatría Privada (ASEPP). Según el especialista, todo depende del modo en que percibamos la semana. "Si es una cuesta, algo duro, el fin de semana es la liberación y, por tanto, es normal que uno odie la llegada del lunes. De hecho, los domingos por la noche ya estamos anticipando la dureza que nos espera ante la perspectiva de una semana que no nos gusta y comenzamos a generar ansiedad. Nuestro cerebro se está anticipando y segrega el cortisol [llamada comúnmente la hormona del estrés], que indudablemente influye en nuestros procesos físicos”, apunta.
Puestos los defectos sobre la mesa, toca ahora amar las virtudes del primer día de la semana. Hay razones científicas para hacerlo:
1. No es peor que el martes o el jueves. Esta es una de las conclusiones de un estudio realizado por Gallup y publicado por la revista Journal of Positive Psychology, que garantiza que el viernes es el único día de la semana que se salva de la quema emocional, por aquello de ser el previo al agradable fin de semana. El resto de los días laborales son aborrecidos por igual y nos hacen sentirnos estresados sin distinción. Por eso, según explicaba a El País Arthur Stone, profesor de psiquiatría de la Universidad de Stony Brook de Nueva York y encargado de la investigación, este estudio acaba con la idea de que los lunes son peores que el resto de días de la semana. “Está injustamente señalado”, clamaba.
2. Pensar sobre el lunes puede animarnos a mejorar nuestra vida. La mejor forma de darle una vuelta a nuestra percepción de los lunes es, como señala López Rodríguez, reflexionar sobre la vida que estamos llevando. "Odiar los lunes y la semana laboral significa que algo no funciona, ya sea a nivel laboral o personal”, dice. "Necesitamos identificar lo negativo y eliminarlo, y buscar las cosas positivas de nuestro trabajo, que todos las tienen”, añade. “Nuestro sistema psicológico funciona como el físico, una fuerza negativa se compensa con una positiva de la misma intensidad. Por tanto, si el trabajo nos produce estrés y tensión, tenemos que tener un mecanismo que nos compense, que es la parte personal. Pero si esta es monótona y aburrida, lógicamente la semana cuesta aún más y el fin de semana se convierte en una liberación”, asegura el doctor. Para solucionarlo, recomienda que identifiquemos qué actividad nos motiva e intentar realizarla varias veces en semana. "Así tendremos una fuente de placer que compense lo negativo”, concluye.
3. Cuidamos más nuestra salud. Aunque pensamos en el 1 de enero y el 1 de septiembre como las fechas típicas para los buenos propósitos, la realidad es que el lunes es el día de preocuparse por la salud. Varias investigaciones médicas han demostrado que el lunes es el día en el que nos ponemos a dieta, decidimos dejar de fumar, volvemos al gimnasio o pedimos cita con el médico. “Estos resultados muestran que el pensamiento y el comportamiento saludable se sincronizan a la semana y el lunes es el día que somos más propensos a comenzar de una forma saludable. Esto sugiere que la gente ve la nueva semana como un nuevo comienzo. Un 1 de enero que ocurre cada siete días”, apuntaba Morgan Johnson, coautor de un estudio publicado en la revista American Journal of Preventive Medicine, que descubrió que las búsquedas en Google sobre temas de salud se disparan los lunes y los martes.
4. Es el mejor día para encontrar trabajo. Los lunes tenemos un 30 % más de opciones de pasar el primer corte de un proceso de selección laboral. ¿Por qué? Los autores de un informe de Bright.com señalan que presentarse a una oferta de trabajo o enviar el currículum un lunes aumenta las opciones de éxito, ya que hay más días para concretar la entrevista y esto ayuda a progresar sobre el resto de candidatos. El peor día, aseguran, es el sábado.
5. Las cirugías salen mejor. Parece una cuestión baladí, pero un estudio publicado por British Medical Journal afirma que los pacientes que programan sus operaciones para el fin de semana tienen un 82 % más de probabilidades de fracaso que los que lo hacen los lunes.
6. Somos más productivos. O eso dice un estudio realizado por Microsoft Office. El momento más productivo de la semana es el lunes a las 10.01 horas. La mañana del primer día de la semana estamos más alerta. Y el nivel de concentración cae a su punto más bajo el martes a las 16.00 horas. Los investigadores infieren entonces que el lunes es el mejor día para hacer frente a la lista de cosas-por-hacer.
7. Momento para el relax femenino. Por extraño que parezca, los lunes son vistos por las mujeres como el día perfecto para relajarse y dedicarse tiempo tras el ajetreo del fin de semana, mientras que el miércoles es la jornada más temida por la cantidad de trabajo y tareas pendientes que se van acumulando. Lo admiten siete de cada 10 féminas en un estudio de la firma de cosméticos naturales Montagne Jeunesse.
8. Organizar un viaje es más barato. Los expertos en e-commerce aseguran que el lunes es el día ideal para hacer compras online. Una investigación del Wall Street Journal afinó más el tiro al subrayar que la mejor ocasión para comprar billetes de avión es el lunes por la noche y el martes. Los lunes es cuando las compañías aéreas, argumentan en el artículo, publican sus ofertas más económicas, y es precisamente esa noche cuando más bajan sus precios (entre el 15 y el 25 %). Por el contrario, las oportunidades más caras aparecen de viernes a domingo, simplemente porque tenemos más tiempo libre para mirar sus páginas web.
9. El día para repostar. Si quiere echar gasolina a su coche, como ya imagina, es más barato hacerlo un lunes. Real Automóvil Club contaba en 2012 que los precios se encarecen a medida que avanza la semana, siendo el primer día del septenario en el que la gasolina cuesta menos y el sábado cuando es más cara.
¿Se ha reconciliado ya con el día de hoy? Eso esperamos…
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