_
_
_
_
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Chile, 40 años después

El sistema institucional chileno es ahora mejor que el que colapsó a comienzos de la década de 1970

En los últimos días se ha recordado el quiebre de la democracia en Chile, al cumplirse 40 años del 11 de septiembre de 1973.

Hoy, en cambio, Chile goza de instituciones políticas y económicas sólidas. Esto ha sido el resultado del esfuerzo de los distintos actores políticos y sociales del país, convencidos de la necesidad de evitar las causas que llevaron al derrumbe de nuestra democracia y de construir un sistema común hacia el futuro. Miramos hacia atrás no para convertirnos en estatuas de sal, sino para aprender y procurar realizar los esfuerzos que más contribuyan a que los chilenos vivan mejor.

En este plano la transición a la democracia, proceso siempre difícil y complejo, adquiere un valor fundamental. Antiguos adversarios se unieron para formar una coalición amplia de centroizquierda, otros lo hicieron en el centroderecha. Todos sabían que de la madurez de los líderes políticos y del éxito del modelo económico-social dependería en gran parte que el restablecimiento de la democracia fuera exitoso y duradero.

Así ocurrió a partir de 1990, cuando asumió el Gobierno el demócrata cristiano Patricio Aylwin, y en los sucesivos Gobiernos hasta ahora. En primer lugar, la democracia efectivamente se consolidó y el sistema institucional chileno es considerablemente mejor que el que colapsó a comienzos de la década de 1970. En segundo término, la economía creció de manera notable y sistemática en las tres últimas décadas, a un ritmo que llegó al 7% de promedio entre 1986 y 1997. Como resultado, la pobreza se ha reducido de un 45% a un 14%, se han ampliado las oportunidades educacionales de los chilenos en todos los niveles, aumentó la esperanza de vida y todos aquellos factores que sitúan hoy a Chile en el primer lugar de América Latina en el Índice de Desarrollo Humano del PNUD. Otro aspecto importante es la reconciliación política, que fue planteada con sentido de futuro y que nos lleva a la convicción de que es necesario preservar y perfeccionar nuestra democracia.

Es más fácil construir cuando se avanza con el esfuerzo de todos

Ese fue precisamente el espíritu que animó al presidente Ricardo Lagos, en 2005, a acometer una importante reforma constitucional que introdujo importantes cambios en la Carta Fundamental. Entonces me correspondía ser el presidente del Senado de Chile, y como tal también valoré ese esfuerzo y trabajé para llegar a un acuerdo constitucional con visión de Estado. Tras aprobarse la reforma, el presidente Lagos afirmó que Chile tenía al fin una Constitución de todos los chilenos.

Hay otros logros valiosos en los últimos años. Primero gobernaron dos demócrata cristianos (Aylwin y Frei), luego dos socialistas (Lagos y Bachelet), hoy un hombre de centroderecha (Sebastian Piñera), lo cual refleja la alternancia política propia de las democracias. Todos ellos han ganado elecciones presidenciales por mayorías sólidas, superando las minorías relativas que eran habituales antes de 1973. Todos han procurado acuerdos legislativos importantes, contando para ello con los votos de la oposición, en temas como las reformas tributaria, educacional y constitucional, entre otras. Todos han respetado, sistemáticamente, la Constitución y las leyes.

Sabemos que queda mucho por hacer, pero es más fácil construir cuando se ha avanzado con el esfuerzo de todos y se han logrado resultados importantes. Hoy los chilenos valoran más una democracia política y una economía próspera. Sabemos por experiencia histórica que las instituciones hay que respetarlas, cuidarlas y perfeccionarlas.

Para ello hemos trabajado y a ello se deben dirigir los esfuerzos de los chilenos, pensando en el futuro y en las próximas generaciones.

Sergio Romero Pizarro es embajador de Chile en España

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_