Lufthansa anuncia una gran reestructuración tras perder 2.100 millones y ser rescatada por Alemania
El mayor grupo aéreo europeo eleva sus pérdidas operativas en el primer trimestre y se ve forzado a reducir el valor contable de sus negocios
El grupo aéreo alemán Lufthansa, recién rescatado por el Estado alemán para evitar su quiebra, registró una pérdida de 2.100 millones de euros (2.350 millones de dólares) en el primer trimestre —un periodo solo parcialmente afectado por la covid-19: lo peor está por llegar entre abril y junio— y anunció una “profunda reestructuración” en “todas las ramas”. La pandemia del coronavirus “influye en forma inédita" en las cuentas del gigante germano, la mayor firma aérea europea, y “la demanda va a reactivarse muy lentamente", según ha dicho este miércoles el presidente y consejero delegado de la compañía, Carsten Spohr. "Tendremos que equilibrar esto con una profunda reestructuración”. Como parte del rescate acordado con el Gobierno de Angela Merkel, Lufthansa recibirá 9.000 millones de euros en ayudas públicas y créditos garantizados por el sector público, que a cambio entrará en su capital con un 20% de las acciones ampliable hasta el 25% y dos puestos en su consejo de supervisión.
Lufthansa registró una pérdida operativa de 1.200 millones de euros con una caída de 18% de la facturación, cifras a las que hay que sumar una rebaja del valor contable de varias de sus unidades de negocio que ha afectado directamente a su cuenta de pérdidas: su firma de catering o la aerolínea Eurowings. Su flota también ha tenido que ser depreciada en 266 millones de euros. Y el desplome en el precio del petróleo, paradójicamente, lejos de ser una buena noticia se ha traducido en una pérdida adicional de 950 millones de euros: el queroseno cotiza hoy por debajo de lo que fijan los contratos de entrega firmados por la mayoría de aerolíneas del mundo, entre ellas la alemana. Entre enero y marzo del año pasado, un periodo generalmente flojo para el negocio aéreo, el grupo Lufthansa registró números rojos de 342 millones.
“Lufthansa prevé rebajar los costes respecto al nivel previo a la crisis”, indicó la empresa, que en abril ya anunció una reducción de su flota en 100 unidades y que ya planteaba cerrar su filial Germanwings, un plan que se ha consumado en las últimas semanas. El proyecto de reestructuración incluirá un fuerte recorte de personal en la matriz y en todas sus filiales (Austrian Airlines y Swiss incluidas) del que aún no hay cifras. En la mesa de negociación se encontrará a sus poderosos sindicatos. El argumento de la empresa es claro: “el tráfico aéreo se ha paralizado casi por completo en los últimos meses y esto ha lastrado nuestro resultado en una dimensión sin precedentes”, ha dicho Spohr este miércoles.
Lufthansa emplea a casi 140.000 personas en todo el mundo y desde que se inició la crisis económica causada por la pandemia ha dejado a unos 700 aviones —de un total de 760— inmovilizados, y a más del 60% de sus trabajadores a tiempo parcial.
Tras sufrir un desplome de sus operaciones de hasta el 98% durante los confinamientos para tratar de evitar la propagación del virus, este miércoles el grupo aéreo alemán ha anunciado que sus planes pasan por elevar su capacidad total en los próximos meses hasta recuperar el 40% de lo que tenía planeado antes de la crisis sanitaria. Una esperanza de recuperación tras unos meses aciagos.
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