Los taxistas acampan en el Paseo de la Castellana de Madrid

Centenares de taxis de Madrid aparcaron sus vehículos en la madrugada del domingo en el paseo de la Castellana, con los consiguientes problemas de tráfico en el centro de la ciudad. Los taxistas tenían previsto quedarse en esa arteria principal hasta que el Gobierno regional regule los vehículos de transporte concertado (VTC). Este domingo se cumplieron siete días desde que los profesionales madrileños iniciaron su paro sectorial.

Los taxistas ya tomaron la Castellana durante una semana a finales de julio y principios de agosto de 2018. De hecho, la Delegación del Gobierno en Madrid ha cursado sendas multas a los dos supuestos organizadores (Plataforma Caracol y Elite Taxi) por esa concentración, que carecía de autorización oficial. Los taxistas se habían concentrado la semana pasada en los alrededores de los recintos feriales de Ifema, con motivo de la celebración de la feria internacional de turismo Fitur. Sin embargo, al comprobar que habían tenido poca repercusión y al terminar el evento, decidieron la noche del sábado trasladar sus protestas al centro de la ciudad.

Durante la mañana del domingo se concentraron ante la cercana del PP, en la calle de Génova, donde pidieron la dimisión del presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido. Delante de los vehículos estacionados pusieron una pancarta donde se leía El taxi de Madrid exige que se cumpla la ley. A la concentración acudieron profesionales de otras ciudades, como Barcelona, Alicante, Santander, Valencia y Zaragoza.

La noche del sábado y la madrugada del domingo se produjeron diversos incidentes entre los taxistas y los VTC. Al menos cuatro de estos vehículos sufrieron ataques con perdigones mientras estaban circulando, según informó el presidente de Unauto (la patronal de los VTC), Eduardo Martín. También hubo pinchazos de ruedas y roturas de lunas y parabrisas. Fuentes policiales informaron de que se produjeron tres detenciones por pinchar las cuatro ruedas de un coche a las 3.00 del domingo en la calle de San Juan de la Cruz. Se les acusa de daños y coacciones.

Mandos de la Policía Nacional y de la Policía Municipal de Madrid mantuvieron el domingo por la tarde una reunión urgente para ver qué medidas tomaban para intentar desalojar el centro de la ciudad de los taxistas.