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Goirigolzarri asegura que el rescate de España trastocó su plan para sanear Bankia

El presidente de Bankia dice en la comisión de investigación de la crisis que su estrategia pasaba por solicitar 19.000 millones en total

El presidente de Bankia, Ignacio Goirigolzarri. En vídeo, declaraciones de Goirigolzarri en la comisión del Congreso de los Diputados.Vídeo: ANDREA COMAS | EP
Jesús Sérvulo González

"En el año 2012, el equipo de Bankia era una amalgama de siete cajas diferentes. Sin referencias ni culturas comunes, con un evidente desenfoque de gestión, y estaba sometido a una presión mediática y social sin precedentes", ha explicado José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, durante su comparecencia en la comisión de investigación de la crisis financiera en el Congreso de los Diputados.

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El Ejecutivo bancario ha repasado los obstáculos a los que se enfrentó desde que en mayo de 2012, en lo más profundo de la Gran Recesión, tomó las riendas de la entidad financiera, que prácticamente estaba quebrada. Entre esas dificultades, ha deslizado, estaba el rescate financiero que el Gobierno de Mariano Rajoy solicitó a las autoridades europeas por 100.000 millones justo un mes después de que él desembarcara en Bankia. Esto trastocó sus planes de saneamiento para el grupo financiero. Le cambió el paso y obligó al grupo a desarrollar un plan de reestructuración cuajado de requisitos y limitaciones impuestos por Bruselas que complicaron su gestión, según ha repasado en el Congreso.

Goirigolzarri ha contado cómo justo antes del rescate de España tenía elaborado el plan de saneamiento y capitalización que le había reclamado el Banco de España. "Remitimos el plan el 11 de junio de 2012 con un requerimiento de necesidades de capital para el grupo BFA de 19.000 millones (de los cuales 12.000 millones iban destinados a Bankia y el resto eran destinados a sanear la matriz)". El plan pasaba porque el FROB —el fondo público de rescate para las entidades en problemas— inyectara ese dinero y se ejecutara el plan de saneamiento, que incluía una estricta dieta del grupo.

"Nuestro plan nunca se puso en práctica"

"Pero nada de eso ocurrió", ha enfatizado Goirigolzarri. Tras el rescate, ha agregado, "nuestro plan de recapitalización, el famoso plan de los 19.000 millones nunca se materializó. Han pasado seis años de esto y que sigan hablando de los 19.000 millones de Goirigolzarri, pero este plan, estará tal vez archivado en algún sitio, pero nunca fue puesto en práctica".

Además, ha explicado que la cantidad que recibió la entidad finalmente fue de 17.959 millones de euros, que guarda cierta similitud con los 19.000 millones reclamados inicialmente por Goirigolzarri y su equipo para sanear la entidad. "Pero como han comprobado, su cálculo nada tiene que ver con el análisis que nosotros realizamos", ha explicado el primer ejecutivo de Bankia.

Además, el dinero que se inyectó definitivamente en Bankia no coincidía tampoco con los 24.743 millones de necesidades de capital calculados por la consultora Oliver Wyman bajo la supervisión de la Comisión Europea, el BCE, la EBA y el FMI.

En contra de las pérdidas de las preferentes

Goirigolzarri también ha detallado todos los requisitos y limitaciones a los que se ha enfrentado durante su gestión de la entidad. Unas condiciones impuestas por la Comisión Europea como consecuencia del rescate financiero a España. Ha justificado que debido a esos requisitos tuvo que cerrar más de 1.000 oficinas (una de cada tres), despedir a casi 7.000 trabajadores (tuvo que reducir la plantilla de 20.400 personas a 13.600), realizar desinversiones por 61.300 millones, y tuvo que cumplir los límites que le prohibían realizar alguna operación corporativa, realizar determinadas operaciones como financiación a promotores o algunas de mercados de capitales, o incluso hacer publicidad sobre el hecho de que Bankia fuera un banco público.

Además, se obligó a los preferentistas a asumir pérdidas tras la conversión de los instrumntos híbridos en capital, con un fuerte descuento. "Comenté publicamente que no estaba de acuerdo con el descuento que se hacía a los preferentistas, ni con el número de oficinas a cerrar, pero que la aternativa era que no se inyectase capital, lo que era mucho peor y, por tanto, que pasaba a ser nuestro plan". Así, que en paralelo al plan de reestructuración 2012-2017 obligadio tras el rescate Bankia presentó un plan estratégico 2012-2015. "Tras recibir las ayudas públicas, Bankia se convirtió en una entidad solvente y lo que nosotros teníamos que hacer era convertirla en una entidad sostenible", ha señalado.

En contra de la banca comercial pública 

Tras el turno de preguntas, Goirigolzarri se ha mostrado en contra de la banca pública. Ha distinguido entre los bancos de desarrollo (como el ICO o el BEI), que tienen un papel contracíclico importante, según ha explicado. "Es positivo y recomendable que el ICO sea de titularidad pública, juega un papel contraciclico importante y lo hemos visto durante la crisis, pero el papel del ICO tiene que ser subsidiario de la banca privada, no tiene que entrar en competencia con las operaciones de la banca privada", ha advertido..

A continuación, ha analizado el papel de la banca comercial de titularidad pública. "No estoy de acuerdo. No conozco ningún caso de modelo sostenible de banca pública de las características. No estoy de acuerdo de un banco de las características de Bankia para que realice una política contraciclica de créditos. No hay parangón en Europa, no visualizo el papel de Bankia en el papel contracicila del crédito y con una falta de concreción de los objetivo de los gestores", ha precisado. "La ausencia de objetivos es la mejor para que cualquier proyecto se deslice por la mediocridad.  Creo que es una mala decisión", ha rematado. Además, ha añadido que si la Administración pública invierte en una entidad financiera deja de hacerlo en otras políticas. "Si dedicamos el dinero de los contribuyentes españoles a tener una participación en un banco público no lo destinamos a otros sectores. ¿Qué es mejor tener el dinero en un banco público o invertirlo en educación?", ha zanjado.

El mercado no está en un buen momento

Respecto a la privatización de la participación del capital de Bankia en manos del Estado a través del FROB, Goirigolzarri ha señalado que cuando se habla de este tema él siempre distingue entre el rol del gestor y el del accionista. "Esa decisión es responsabilidad del accionista, del FROB, del Gobierno definir a qué precio se tienen que vender", ha advertido. 

No obstante, ha aclardo que hay que tener en cuenta que "el único paso que hace falta para la normalización del proyecto Bankia es la privatización. Y a la hora de privatizar hay que tener en cuenta la situación del mercado, del precio que el mercado le ponga al sector financiero". En ese punto, el presidente de Bankia ha asegurado con rotundidad: "Hoy no es un buen momento, el sector financiero está penalizado porque estamos en una situación de intereses negativos. Y creo que el valor del sector financiero se va a estabilizar en los próximos meses conforme se vaya normalizando la política monetaria del BCE".

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Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

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