Aeroméxico suspende sus vuelos a Venezuela

Este jueves la aerolínea Aeroméxico ha anunciado que suspende sus vuelos a Caracas de forma indefinida. En un comunicado, la firma mexicana detalla que su decisión se debe a la difícil situación económica que vive Venezuela. La flota de la empresa llevaba cinco años haciendo la ruta Ciudad de México- Caracas.

"Aeroméxico cuenta con una red de vuelos muy importante en Centro y Sudamérica, por lo que continuará trabajando para brindar más opciones a sus clientes, y evaluar en el futuro su regreso a la capital venezolana", señala el comunicado de la compañía. Aeroméxico reembolsará todos los billetes con fecha posterior al 23 de junio y con destino a la capital venezolana. 

Este jueves era imposible comprar un boleto directo hacia Venezuela ni a través del servicio telefónico ni en la página web, de donde ha desaparecido la ciudad de Caracas como destino. Los únicos vuelos que gestiona la aerolínea es con escala a través de Avianca y vía Bogotá, comprobó este diario.

Aeroméxico se suma a otras cuatro empresas aéreas que han suspendido sus viajes a Venezuela a consecuencia de la dura crisis económica que afecta al país bolivariano, con una inflación de tres dígitos y escasez de medicinas y alimentos. Entre las aerolíneas que han suspendido de forma indefinida sus vuelos se encuentran Latam, Lufthansa, Air Canadá y Tame, propiedad del gobierno ecuatoriano.

Latam, la aerolínea más grande de América Latina, esgrimió razones económicas para esta suspensión y destacó que considera al país un mercado relevante, y por lo tanto, trabajará para retomar estas operaciones a la brevedad posible.

Lufthansa operó el 17 de junio su último vuelo hacia el país sudamericano. En su despedida los pilotos quisieron rendir un homenaje al pueblo venezolano y ondearon una bandera desde la cabina de pilotos.

El país sudamericano enfrenta la inflación más alta del mundo y los ingresos de las aerolíneas caen en picado debido al tipo de cambio oficial impuesto por el Gobierno. Actualmente Venezuela ofrece a las aerolíneas un tipo de cambio muy poco ventajoso que provoca que haya grandes pérdidas ya que los boletos se venden en bolívares, la moneda nacional. La horquilla llega a oscilar entre un curso oficial de 10 bolívares por dólar frente a los en torno a 1.000 que se pagan en el mercado negro. Además de eso las compañías aéreas no pueden comprar los dólares necesarios para repatriar sus ganancias y costear sus costos fuera de Venezuela

Las deudas de Venezuela con compañías como Lufthansa alcanzan los cientos de millones. La amenaza, sin embargo, del gobierno de Nicolás Maduro es que compañía que deje de volar a Caracas perderá su licencia para operar en el país de forma definitiva.

El desplome de los precios del crudo en los mercados internacionales ha golpeado el modelo económico socialista del presidente venezolano Nicolás Maduro, lo que ha derivado en una aguda escasez de alimentos y bienes básicos con consecuentes protestas y saqueos de venezolanos molestos.