El primer ron del salón de la fama

Tras ser elegido durante cinco años consecutivos como “el mejor ron del mundo” y ser el primero en entrar en el salón de la fama mundial, el Zacapa se ha convertido en la empresa guatemalteca más exitosa a escala global y en el mejor embajador de Guatemala. Detrás de ese éxito hay una mujer: Lorena Vásquez, su master blender, que nos lleva de la mano a través de la historia de uno de los mayores éxitos empresariales de este país centroamericano.

Vásquez, nacida en Nicaragua, llegó a la empresa en 1984. Su primer trabajo fue en el área de control de calidad en la Destilería de Industrias Licoreras de Guatemala. “Esto me permitió desarrollar mi sensibilidad innata a los aromas y sabores”, puntualiza. Un año más tarde se involucró directamente en la producción del ron Zacapa.

Narra Vásquez que el Zacapa surgió en 1971, con ocasión del centenario de la ciudad homónima del este de Guatemala. “El ron era la reserva de la familia. En principio se pensó como una bebida específica para esa conmemoración. Solo se comercializó varios años después”, explica.

“Cuando comencé a trabajar en el área de control de calidad”, señala con algún dejo de nostalgia, “mi obligación primaria era revisar el estado de los destilados que serían destinados a las reservas. Fue así como llegué al Zacapa añejo, que solo se embotellaba para fiestas como las de finales de año o para regalar a los socios de la empresa”.

“Al catarlo”, relata, “me di cuenta de que era una bebida muy especial. Algo fuera de serie, que debería trabajarse como tal. Pensé entonces que la empresa tenía centros de añejamiento más apropiados para una bebida de tal naturaleza y entendí que el más apropiado era el de Quetzaltenango, por sus condiciones de altura y temperatura promedio.

Un cambio radical. La ciudad de Zacapa, 157 kilómetros al este de la capital, está a 220 metros sobre el nivel del mar y su temperatura promedio supera los 30 grados centígrados. Quetzaltenango, 160 kilómetros al oeste, está a 2.300 metros de altura y su media ronda los 15 grados. “Una de mis primeras anécdotas se remiten a la labor de convencimiento de ese traslado ante los ejecutivos de la empresa. Llevar todos los añejos hasta Quetzaltenango permitiría ganar en calidad en cuanto a aromas y sabores. Al comentar la inquietud con mi jefe inmediato, su primera pregunta fue: ‘¿Quién lo va a proponer? ¿Tú?”.

EMPEÑO PERSONAL

Pero Lorena dice que sabía lo que quería y estaba dispuesta a luchar por su idea. “La responsabilidad era enorme y los jefes me miraban incrédulos. ¿Y si no funciona?”, era la pregunta que flotaba en el ambiente. Pero la joven master blender impuso su criterio y los resultados hablan por sí mismos. El ron Zacapa está actualmente en 122 países, lo que lo convierte en el producto guatemalteco con más presencia en el mundo.

La bebida alcanzó dimensión internacional después de ganar, durante cinco años consecutivos, el galardón al mejor del mundo. El primer premio fue totalmente inesperado. Un día cualquiera, en las oficinas se recibió una llamada telefónica donde se les informaba que habían sido seleccionados para tal distinción y preguntaron quién iría a recibir el galardón. El anuncio sorprendió a todos y, al comprobarse que nadie había mandado la bebida al concurso, creyeron que se trataba de una broma.

Pero era una feliz realidad. Ocurrió que un publicista de Nueva York, coleccionista de rones, recibió una botella de Zacapa que había traído desde El Salvador una empleada que volvía de pasar sus vacaciones en casa. Tras catarlo, el publicista decidió llevarlo a Barbados, donde se celebra el concurso, y sus compañeros jueces no dudaron en calificarlo como excepcional. Establecido esto, el gerente de marketing de Zacapa viajó a recibir el premio.

“Entre los aspectos que hacen diferente al ron Zacapa”, explica Vásquez, “está la miel virgen [el jugo de la caña concentrado] como materia prima, frente a la melaza. También está nuestra levadura, que es otro diferenciador. A lo anterior se suma el proceso de añejamiento, que se realiza a gran altura, mientras la mayoría de rones en el mundo se añejan en climas cálidos, explica la experta.

“El proceso de añejamiento es dinámico”, narra. “Es el sistema solera. Las familias fundadoras de la empresa son de origen español. Llegaron a Guatemala con el conocimiento del sistema solera de los vinos de Jerez y el acceso a la compra de este tipo de barricas. Así, los rones de la casa comenzaron a añejarse con este sistema de solera en el cual se van realizando mezclas durante todo el proceso”.

“Tradicionalmente, en el proceso de los rones las barricas más utilizadas son las de roble blanco americano que anteriormente han añejado whiskys. En el caso de Zacapa, para el de 23 años utilizamos cuatro tipos diferentes de barricas: primero, de roble blanco americano, que previamente han añejado whisky. Esas las compramos en Estados Unidos. Para la segunda etapa utilizamos barricas de roble blanco americano, pero quemadas en nuestras bodegas. Quitamos la tapa de la barrica y hacemos un quemado muy fuerte, porque la madera, cuando es sometida a altas temperaturas se degrada y nos brinda aromas de vainilla o almendra”, explica.

“Para la tercera etapa de añejamiento se utilizan barricas que antes añejaron vinos de Jerez, traídas de España, mientras que para la cuarta etapa utilizamos barricas que anteriormente añejaron vinos de Pedro Ximénez, igualmente traídas de España. Esto explica por qué en muchos lugares al Zacapa lo llaman ‘el coñac del ron”.

ACUERDO INTERNACIONAL

El crecimiento internacional de la marca empezó cuando el grupo de Industrias Licoreras de Guatemala (ILG) otorgó a la empresa Diageo un acuerdo exclusivo de distribución de la marca Zacapa por un periodo de tres años. Posteriormente, Diageo adquirió el 50% de las acciones. Diageo es una empresa que cotiza tanto en la Bolsa de Valores de Nueva York (DEO) como en la Bolsa de Valores de Londres (DGE). La parte guatemalteca pertenece a una empresa familiar.

El éxito del ron Zacapa se enmarca en la creciente fama que están ganando los rones producidos en América Central, como son el Flor de Caña, de Nicaragua, o El Abuelo, de Panamá, que compiten codo a codo con los prestigiosos rones cubanos, dominicanos y puertorriqueños, además de los producidos en los diferentes países de las Antillas no hispanas.