Zapatero sugiere una intervención militar de España en Libia

El presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró ayer que una intervención militar internacional debe ser el "último recurso" para frenar el uso de la violencia contra su pueblo por parte del régimen de Gadafi. Añadió que, para que España participe en una operación militar, deben darse tres condiciones: la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU, el acuerdo del Consejo Europeo y, "en su caso", la luz verde del Parlamento. Esta última mención sugiere que el Gobierno piensa en el despliegue de tropas en el exterior, ya que solo en ese caso es preceptiva la aprobación del Congreso, según la ley de Defensa Nacional de 2005.

Las opciones que hasta ahora ha propuesto la ministra de Defensa, Carme Chacón -el despliegue de la flota de la OTAN frente a las costas de Libia; y los vuelos de aviones de vigilancia Awacs sin violar espacio aéreo libio- no requieren tal aprobación. En cambio, sí sería necesaria si se destacaran cazas F-18 en bases italianas, como se hizo en la década de los noventa para imponer la zona de exclusión aérea sobre Bosnia.

Zapatero expresó su confianza en que no sea necesaria la intervención militar. "Ha habido ya tantos pronunciamientos de la comunidad internacional hacia lo que está haciendo el régimen de Gadafi que debería ser suficiente para que "tomara nota" y concluyera "cuanto antes" su viaje "a ninguna parte".

De su lado, la ministra de Asuntos Exteriores y Cooperación, Trinidad Jiménez, aseguró que España ha gastado ya 2,26 millones de euros en ayuda humanitaria para paliar la emergencia creada por la revuelta en Libia. Además, ha repatriado a unos tres mil egipcios que huyeron desde dicho país al vecino Túnez y ayer trasladó en dos vuelos a 380 subsaharianos desde Túnez a Accra (Ghana).