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Reaparece un científico iraní en la Embajada de Pakistán en Washington

Hillary Clinton asegura que ha estado en EE UU "por su propia voluntad"

Ángeles Espinosa

Shahram Amirí, un físico nuclear iraní que según Teherán fue secuestrado por Estados Unidos durante una peregrinación a La Meca, se encuentra desde anteanoche en la sección de intereses de Irán de la Embajada de Pakistán en Washington, informó ayer la radiotelevisión de la República Islámica. El desenlace sigue a una sucesión de vídeos contradictorios sobre sus circunstancias. De momento, la reaparición de Amirí, más que esclarecer el caso, lo complica. Para empezar, no está claro si el científico llegó hasta la legación diplomática por su propio pie, como se desprende de las declaraciones de un portavoz estadounidense, o si "fue entregado por agentes de la CIA", como afirman los medios iraníes.

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"Mi secuestro ha sido un acto vergonzoso para Estados Unidos... Durante los últimos 14 meses, he estado bajo una enorme presión psicológica y vigilado por agentes armados", declaró Amirí según la televisión estatal iraní, que dijo haber hablado con él por teléfono. El científico aseguró querer "regresar lo antes posible" a su país.

Poco después de conocerse su reaparición, un portavoz del Departamento de Estado, Philip J. Crowley, dijo que Amirí no estaba retenido en Estados Unidos contra su voluntad y que era libre para irse cuando quisiera. Curiosamente, Crowley añadió que el científico había informado a las autoridades estadounidenses de que deseaba salir del país, lo que da a entender que han estado en contacto con él durante su estancia allí, aunque hasta ahora habían hecho como si la cosa no fuera con ellos. Todas las declaraciones han sido siempre muy ambiguas.

En el mismo sentido se manifestó la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, quien declaró ayer que el científico ha estado "por su propia voluntad" en EE UU y es libre de marcharse cuando quiera. La jefa de la diplomacia estadounidense añadió que Amirí "de hecho, tenía previsto viajar a Irán ayer [por anteayer] pero no pudo arreglar todos los trámites necesarios para alcanzar Irán a través de un país de tránsito", informa Reuters.

Por su parte, la agencia iraní Fars, próxima a la Guardia Revolucionaria, interpretó la noticia "como una nueva victoria del aparato de inteligencia iraní, que se esforzó para presentar pruebas reales que corroboran el secuestro de Amirí por la CIA".

La familia del investigador denunció haber perdido el contacto con él a primeros de junio de 2009 durante un peregrinaje a La Meca. Tras ser interrogado por las autoridades saudíes de inmigración el 31 de mayo, Amirí se inscribió en un hotel de esa ciudad, de donde se fue cuatro días después sin dejar huella. En octubre, el ministro de Exteriores iraní, Manuchehr Mottaki, aseguró "tener pruebas de que Estados Unidos está implicado en la desaparición de Amirí" y responsabilizó a Arabia Saudí de haber cooperado. Ambos negaron su relación con el asunto.

Sin embargo, el diario israelí Haaretz sugirió que el iraní "buscaba asilo político". Esa versión alcanzó mayor notoriedad cuando a finales de marzo la cadena de televisión estadounidense ABC reveló que la CIA había organizado su fuga. El viaje a La Meca habría sido una tapadera para garantizar su salida sin problemas de Irán. Según las fuentes de ABC, en EE UU Amirí fue interrogado de forma extensiva y su testimonio ayudó "a confirmar las evaluaciones de los servicios secretos estadounidenses sobre el programa nuclear iraní".

El físico, de treinta y pocos años, investigaba sobre el uso médico de los isótopos radiactivos en la Universidad Politécnica Malek Ashtar, vinculada a la Guardia Revolucionaria. Así que su posible defección encajaba con la existencia de un programa bautizado Brain Drain (literalmente, fuga de cerebros), que la CIA puso en marcha en 2005 para atraer a posibles desertores iraníes. Pero todo eran especulaciones. Ni siquiera se sabe cuál era su nivel de conocimiento del controvertido programa nuclear iraní.

"Tras la publicación de mis declaraciones en Internet y el deshonor para Estados Unidos, querían enviarme a Irán sin hacer ruido, con una compañía aérea extranjera, para poder negar todo el asunto", explicó en su entrevista de ayer el científico en referencia a varios vídeos suyos aparecidos el mes pasado.

Las grabaciones, cuya autenticidad no puede asegurarse, resultaron ser de lo más contradictorias. En la primera de ellas, difundida por la televisión iraní el 7 de junio, afirmaba haber sido secuestrado por los servicios secretos de EE UU y estar detenido cerca de Tucson (Arizona). No explicaba cómo estando detenido había podido grabar el vídeo y difundirlo. Unas horas más tarde, en otro vídeo colgado en YouTube, un hombre que se identificaba como Amirí aseguraba estar estudiando en EE UU libre y feliz. Tres semanas más tarde, la televisión iraní emitía un tercer vídeo en el que afirmaba haber escapado de los agentes que le vigilaban y pedía ayuda para regresar a Irán. Pocas horas después, en YouTube, aseguraba que iba a regresar pronto a casa.

Shahram Amirí, en una imagen de la televisión estatal iraní en inglés Press TV difundida el 8 de junio.
Shahram Amirí, en una imagen de la televisión estatal iraní en inglés Press TV difundida el 8 de junio.AFP

Cronología de una desaparición

Junio 2009- Shahram Amirí desaparece en Arabia Saudí mientras peregrina hacía la Meca.

Septiembre de 2009- El Organismo Internacional de Energía Atómica revela la existencia de una segunda planta de enriquecimiento de uranio en Irán.

Octubre de 2009- El ministro de Exteriores iraní Manucher Mottaki asegura tener documentos que prueban el secuestro del físico por parte de EE UU.

Diciembre de 2009- Irán acusa a Arabia Saudí de ayudar a EE UU en el secuestro.

Marzo de 2010- Varios medios aseguran que Amirí ha desertado de la causa iraní y está en EE UU por voluntad propia. La cadena ABC asegura que ha ayudado a confirmar la existencia de la segunda planta de enriquecimiento de uranio.

Junio 2010- La televisión estatal iraní trasmite un vídeo en el que Amirí declara haber sido secuestrado y torturado por EE UU. Días después otro vídeo con otro Amirí es colgado en Internet. El supuesto físico dice estudiar en Estados Unidos. Irán llama al embajador suizo en Teherán y le entrega documentos que, asegura, prueba el secuestro del físico. El 29 la televisión estatal trasmite otro vídeo de Amirí, en el que pide ayuda a las organizaciones por los derechos humanos tras haber escapado de sus captores.

Julio 2010- Irán envía más documentos a EE UU sobre la desaparición del científico y solicita su liberación. El 13 el físico se refugia en la oficina de intereses iraníes de la Embajada paquistaní en Washington, que gestiona los asuntos diplomáticos de Teherán en EE UU.

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Sobre la firma

Ángeles Espinosa
Analista sobre asuntos del mundo árabe e islámico. Ex corresponsal en Dubái, Teherán, Bagdad, El Cairo y Beirut. Ha escrito 'El tiempo de las mujeres', 'El Reino del Desierto' y 'Días de Guerra'. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense (Madrid) y Máster en Relaciones Internacionales por SAIS (Washington DC).

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