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La Comunidad de Madrid asfixia a su gran embajada en Argentina

El Gobierno regional suprime las ayudas al principal centro de emigrantes tras el rechazo de los socios a su candidato a la presidenciaUna responsable regional cortó las ayudas por desavenencias con la dirección

Jesús Sérvulo González

La Casa de Madrid en Argentina, la gran embajada de la Comunidad de Madrid en el exterior, no recibe subvenciones desde el último cuatrimestre de 2009. Está a punto de cerrar su fabuloso local en el centro de la capital porteña por falta de recursos. La Agencia Madrileña de Emigración (AME), dependiente del Ejecutivo regional, alega "desavenencias económicas, de funcionamiento y de comunicación". Sin embargo, los directivos del centro aseguran que todos los problemas se originaron tras la negativa de los socios a aceptar como presidente a un hombre impuesto por la AME.

La historia de esta embajada madrileña comenzó el 24 de marzo de 2007 con una gran fiesta en el número 940 de la calle de la Libertad de Buenos Aires, una de las zonas más distinguidas. Canapés y todo tipo de bebidas espirituosas volaban por los 740 metros cuadrados de la Casa de Madrid en Argentina, que ocupa dos plantas del edificio. La recepción continuó en la discoteca Opera Bay.

Madrid alega desavenencias económicas y de funcionamiento
La dirección del centro asegura que ha justificado todos los gastos

Había que causar buena impresión a la delegación de Madrid que había impulsado la asociación para los cerca de 14.000 madrileños en la ciudad. Francisco Granados, consejero de Presidencia, Justicia e Interior encabezaba la misión junto con Ana Botella, concejal de Madrid. El estreno del primer centro que abría el Ejecutivo regional en el exterior se celebró a todo trapo. En aquella época no había ni rastro de crisis. La Agencia Madrileña de Emigración (AME) destinó al centro 200.000 euros en 2007 y otros 205.000 el año siguiente, según los presupuestos regionales. Desde su constitución, la Comunidad de Madrid ha entregado más de 600.000 euros al centro.

El Gobierno regional presumía de la actividad desplegada por esta casa. Esperanza Aguirre, presidenta, visitó el centro en el primer aniversario del centro. Todo marchaba sobre ruedas.

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Pero la situación cambió en otoño pasado. El presidente, Ramón Carballo, próximo al PP, presentó la dimisión después de mantener fuertes discusiones con la directora de la Agencia Madrileña para la Emigración, Victoria Cristóbal, quien precisa que "si esa casa se viene abajo, no es por culpa mia". Según Cristobal, "se ha pagado todo lo que se debía" y el problema "ha sido de comunicación". También precisa que se enteró "por la prensa de las elecciones" y que su propósito "no es cerrar, sino ir sumando centros".

Se convocaron elecciones. La Comunidad de Madrid que había tutelado hasta entonces la Casa de Madrid en Argentina propuso como candidato a Francisco Puebla, de su confianza. Pero en Buenos Aires tenían otra idea. Se sucedieron las reuniones y con ellas aumentaron las presiones del Ejecutivo regional. Una semana antes de elegir a los responsables del centro para emigrantes, el candidato promocionado por el Gobierno madrileño aseguró que la Comunidad cortaría las subvenciones si él no resultaba elegido, según consta en un acta.

Días después se constituyó una única lista de consenso en la que se excluía a Puebla y la directora de la AME, Victoria Cristóbal, convocó una reunión. Un acta de ese encuentro relata cómo la responsable expresó su disgusto por la formación de la lista que acudía a las elecciones porque desde Madrid se había sugerido que Puebla fuera el presidente y esa petición no se había atendido. A continuación, Cristóbal dio por zanjado el proyecto de la Casa de Madrid en Argentina por la falta de comunicación y la escasez de actividades.La directora de la Agencia Madrileña avisó, en octubre del año pasado, de que cortaría el grifo. "Doy por zanjado el proyecto de la Casa de Madrid en Argentina", aseguró durante la reunión. Semanas más tarde, la Comunidad de Madrid presentó los presupuestos para 2010. En esas cuentas no aparece ni un solo euro para la Casa de Madrid en Argentina. Aunque sí se reservan 156.825 euros para otro centro de nombre parecido, la Casa de Madrid en Buenos Aires. Hace pocas semanas, se ha constituido una tercera asociación llamada Centro de Madrileños en Argentina. A estos hay que añadir otras dos asociaciones de Madrid en Mar del Plata, Rosario y Bahía Blanca. Además de los centros en Argentina, la AME ha constituido otras sedes en Uruguay, Chile, Estados Unidos (Miami), México y Francia. La Comunidad subvenciona con unos 15.000 euros a cada una de estas sedes.

Pero la embajada que hasta entonces había sido la joya de la corona se quedó sin dinero. Esta casa organizó, entre septiembre de 2008 y agosto de 2009, una treintena de conferencias y un ciclo de cine español. También preparó actos para todas las fiestas patronales de Madrid (San Isidro, la Almudena, el Dos de Mayo...). Además, se encargó de la recepción de las autoridades españolas con motivo de la final de la Copa Davis en noviembre de 2008, según un informe de auditoría que supervisa las cuentas de la entidad en ese periodo sin encontrar ninguna irregularidad.

Entre las actividades organizadas se encuentran las actuaciones de Olga María Ramos y de Nati Mistral. De la primera el informe recoge: "Qué lujo, qué placer, qué emoción. Eso y mucho más es lo que nos transmitió ese pedazo de artista que es Olga María Ramos, que atrapó con sus mantones, mantillas y abanicos a los asistentes". Y de Nati Mistral: "Nada más pisar el escenario, nos cautivó con su personalidad, con su gracejo, simpatía tan madrileña...".

El centro ha mantenido una amplia actividad en sus instalaciones. Cuenta con una biblioteca de más de 600 ejemplares relacionados con Madrid. Además de la zona de administración hay un pequeño cine donde se emiten proyecciones dedicadas al cine español. La Casa de Madrid también cuenta con un pequeño escenario con capacidad para 400 personas. Ahora la Casa de Madrid en Argentina está condenada al ocaso. Después de que la Comunidad de Madrid le cortara la subvención acumula deudas por el alquiler del local y el pago de los seguros sociales de sus trabajadores.

La semana pasada el asunto aterrizó en la Asamblea de Madrid. La diputada socialista Encarnación Moya presentó una pregunta en la comisión de Presidencia sobre la cuestión. La directora de la AME explicó en la Cámara madrileña que la asociación no había justificado correctamente los gastos del centro [requisito necesario para cobrar la subvención]. Pero la dirección del centro ha presentado todas las facturas en regla.

Victoria Cristóbal reconoció entonces problemas con la Casa de Madrid en Argentina y aseguró que en 2009 ya les advirtieron de que no se estaban cumpliendo los objetivos del convenio. A pesar de que la embajada realizó medio centenar de actividades. Cristóbal, además, justificó la decisión de suprimir la subvención puesto que el centro no está inscrito en el Registro de Asociaciones, "una condición sine qua non para colaborar con ellos", dijo. No obstante, durante tres años recibió ayudas sin ese requisito.

"La única desavenencia económica formal que nos consta es un expediente que se abrió en diciembre de 2009, presuntamente por no justificar pagos por valor de 12.000 euros, pero fue finalmente cerrado sin ninguna sanción ni duda, porque proporcionamos copia de todas las facturas cuestionadas", asegura Roberto Martín del Cura, actual presidente de la Casa.

Al margen de la disputa política o personal parece existir otra de índole económica, relacionada con el pago de la fiesta que se organizó para la visita de Esperanza Aguirre a Buenos Aires, en marzo de 2008. El sarao, con más de 4.000 invitados, se celebró en una conocida sala de fiestas de la ciudad y costó 92.572 euros, que pagó de su bolsillo el primer presidente de la Casa de Madrid, Ramón Carballo, según reconoce la dirección actual. Sin embargo, los responsables del centro reconocen que no existe ningún documento que demuestre que era un adelanto que realizó al fundador. "El dinero ya le ha sido reintegrado a Carballo. Unos 40.000 euros con cargo al presupuesto y otros 50.000 dejando de pagar el alquiler. Se puede decir que la fiesta de Aguirre la han financiado los dueños de este local", ironiza el secretario de la Casa. "Conste también que nunca ha existido un expediente formal, ni nada parecido, por este tema", insiste Martín del Cura.

La junta directiva negocia ahora una salida digna del local y el alquiler de otro, más modesto, donde la Casa de Madrid pueda seguir existiendo, quizás mediante ayudas a proyectos concretos de la Dirección General de Emigración, dependiente del Gobierno estatal.

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Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

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