El desbordamiento del gasto lleva el déficit del Estado al 6% del PIB

El agujero de las cuentas del Estado se agranda mes a mes. Hasta septiembre, el desfase entre gastos e ingresos roza ya los 63.000 millones de euros, casi cinco veces más que hace un año. En proporción al PIB, el déficit estatal sube al 5,96%, frente al 5,73% que marcaba en agosto. Un incremento que se debe a la acelerada expansión del gasto público, que irá a más en el tramo final del año.

En la primera mitad de 2009 el desequilibrio de las cuentas de la Administración central vino marcado por el desplome de la recaudación tributaria, fiel reflejo de la crisis económica y de algunas medidas fiscales que el Gobierno puso en marcha para combatirla (deducción de los 400 euros en el IRPF, aplazamientos y mayores devoluciones en el IVA). Pero el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, aseguró ayer que la caída es ahora más moderada. Si hasta agosto la variación interanual de ingresos por impuestos reflejaba una pérdida del 21,4%, en los nueve primeros meses esa merma se atenúa hasta el 19,3%.

En la conferencia de prensa para explicar los datos de ejecución presupuestaria, Ocaña destacó la evolución mensual del IVA (en agosto la recaudación bajó un 13,5%, en septiembre un 9,3%) como indicador de que el retroceso en el consumo de las familias y la compraventa de vivienda nueva también estaría atemperándose.

El secretario de Estado de Hacienda informó de que la subida de los impuestos especiales aprobada en junio ha elevado la recaudación en unos 170 millones al mes, lo que permitiría llegar a los 850 millones adicionales presupuestados para este año. Y reiteró su confianza en que la subida del IVA (del 16% al 18%) prevista para 2010 y la reactivación del consumo permitan alcanzar el objetivo plasmado en el nuevo proyecto de Presupuestos (un 26,1% de aumento de recaudación el próximo año), que muchos expertos cuestionan.

El desequilibrio se acentúa por el lado de los gastos. Si hasta agosto aumentaban un 22% respecto al mismo periodo de 2008, el incremento interanual hasta septiembre supera el 25%. Y seguirá en aumento. Al crecimiento desbocado de las transferencias para atender las prestaciones por desempleo (13.508 millones más) y el impacto de varias medidas contra la crisis (los fondos extraordinarios de inversión), se sumará que, tradicionalmente, buena parte de las partidas del presupuesto se ejecutan en el tramo final del año.

"Los datos son coherentes con nuestra previsión", afirmó Ocaña, en referencia al saldo negativo del 8,1% del PIB que el Gobierno proyecta para el conjunto del año. Pero se tentó la ropa al referirse al déficit conjunto de las administraciones (la previsión oficial es del 9,5% del PIB). "Habrá que esperar a los datos de cierre de las comunidades y los ayuntamientos", dijo.

Lo que también parece descontado es que la Seguridad Social cerrará el año por encima del superávit previsto (un 0,4% del PIB). Hasta septiembre, el saldo positivo es aún del 1,14% del PIB, pese a caer más de 5.000 millones en el último año.