El Gobierno cubano excarcela a un preso político y a un empresario español

El Gobierno de Raúl Castro recompensó ayer al ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, con un gesto simbólico: la liberación de Nelson Alberto Aguiar Ramírez, uno de los 54 disidentes del grupo de 75 encarcelados en 2003 que seguían en prisión. La liberación se produjo en la madrugada de ayer, poco después de que el ministro regresara a Madrid tras entrevistarse durante casi tres horas con Raúl Castro, a quien prometió impulsar, bajo la presidencia española de la Unión Europea, la derogación de la denominada Posición Común, que condiciona las relaciones de la UE con Cuba a los avances democráticos en ese país.

Aguiar, que cumplía una condena de 13 años de cárcel, era uno de los presos políticos para quienes Moratinos pidió medidas humanitarias por encontrarse enfermos. También fue puesto en libertad sin fianza, aunque no podrá abandonar la isla hasta que se celebre el juicio, el empresario Pedro Hermosilla, presidente del Grupo AGEM (Auxiliar General de Electromedicina), que llevaba un mes detenido, acusado de cohecho.

Además, las autoridades han permitido salir de la isla a otros dos disidentes: Omelio Lázaro Angulo Borrero, que disponía de una "licencia extrapenal" por motivos de salud, y Elsa Morejón, esposa del doctor Oscar Elías Biscet, un conocido disidente que continúa en prisión. El permiso para que esta última saliera del país ya fue solicitado por una alta funcionaria del Departamento de Estado de EE UU que visitó Cuba en septiembre.

Moratinos aseguró, recién llegado a Madrid, que las medidas adoptadas por el régimen cubano demuestran que la política "constructiva de respeto mutuo y diálogo" que practica el Gobierno español con La Habana "da resultados". El ministro agregó que dos de los disidentes han mostrado interés por viajar a España, aunque "si quieren pueden seguir en la isla".

Menos satisfecho se mostró el portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, Elizardo Sánchez, quien dijo que "cada vez que se produce una excarcelación es una buena noticia, pero necesitamos 200 buenas noticias como ésa, porque son los presos políticos que siguen en prisión". El activista cubano agregó que "regalar prisioneros como si fueran rehenes es casi una obscenidad" y que "resulta ridículo que haya que dar las gracias porque a alguien se le concede permiso para salir de su país".

Omelio Lázaro agradeció a los gobiernos de Costa Rica y España "la gestión humanitaria que han hecho".