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Iveco despedirá a la mitad de los trabajadores que había previsto

Pablo de Llano Neira

Iveco ha llegado a un acuerdo con los sindicatos de la empresa (CC OO y UGT) para rebajar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que presentó el 29 de abril. El fabricante de camiones pretendía despedir a 1.024 de sus 2.900 trabajadores, pero tras la negociación ha aceptado rescindir sólo 463 contratos.

El pacto incluye una cláusula de "garantía de retorno" de los despedidos en un plazo de dos años. Los sindicatos confían en que las jubilaciones en la plantilla y un posible repunte de la producción permitan lograr ese objetivo.

Desde abril, Iveco monta 28 camiones al día, casi 100 menos que los que producía a diario en noviembre del año pasado. La plantilla se ha dividido en cuatro grupos que trabajan una semana al mes. La evolución del negocio, según la portavoz de la compañía, es "imprevisible".

Los trabajadores de la empresa ven su futuro con pesimismo: "La producción no va a subir, y en diciembre, cuando termine este ERE, nos meterán otro golazo", decía ayer un operario que no quiso dar su nombre. El representante de UGT en la empresa, Juan Antonio Lorido, reconoció que el año que viene "habrá otro ERE seguro", y pone sus esperanzas en que acabe la crisis económica: "Esperemos que a lo largo de 2010 suba la demanda de camiones y vuelva a haber trabajo".

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