Merkel ofrece una gran rebaja fiscal ante las elecciones
La derecha alemana pacta reducir los impuestos para hacer frente a la crisis
La canciller Angela Merkel zanjó ayer la persistente discusión en su partido, la Unión Demócrata Cristiana (CDU), sobre la conveniencia de una subida de impuestos tras las elecciones de septiembre. En una reunión de varias horas, los líderes de la CDU y los de su partido hermano bávaro, la Unión Social Cristiana (CSU), aprobaron en Berlín una reducción de impuestos de unos 15.000 millones de euros entre 2009 y 2013. Esta rebaja fiscal será la gran baza del programa de los conservadores alemanes para las elecciones generales del próximo septiembre.
La canciller tuvo que hacer valer su considerable autoridad en la CSU para acabar con meses de discusiones al respecto. Aseguró Merkel que el IVA no aumentará en los próximos cuatro años. Afirmó que esa reducción impositiva "moderada" se hará en dos fases y aseguró que se trata de la respuesta "correcta" y "sensata" para hacer frente a la crisis económica. Los democristianos, que terminaron ayer de redactar sus promesas, las presentarán hoy y serán sometidas a votación en un congreso en la capital alemana.
La CDU se prepara para poner fin a la coalición con los socialdemócratas
No acudieron ayer a la reunión los barones regionales Günther Oettinger y Wolfgang Böhmer, primeros ministros de los Estados federados de Baden-Würtenberg y Sajonia-Anhalt, respectivamente. Ambos habían atizado el controvertido debate fiscal en los últimos días. Pedía el primero un aumento del IVA, y el segundo, que suba la carga fiscal a los que más ganan.
Merkel, cuya disposición a bajar los impuestos ha crecido según se van acercando las elecciones, restó importancia a las tesis de los disidentes y subrayó la necesidad de la rebaja fiscal, sobre todo a las rentas medias. Los democristianos proponen, según la agencia alemana de noticias DPA, un aumento de la cantidad máxima deducible por hijo hasta 8.004 euros, la reducción de la carga mínima del 14% al 12% y una nueva organización, más provechosa para los asalariados, de los cambios del tipo impositivo al aumentar los ingresos.
El líder de la CSU y primer ministro de Baviera, Horst Seehofer, sostuvo que el objetivo de la alianza conservadora no era sólo ganar los comicios sino acabar con la actual coalición con los socialdemócratas del SPD y aliarse con sus socios naturales del Partido Liberal (FDP).
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